El dólar castigo al peso esta semana con un aumento de 1.60 por ciento frente a su nivel registrado el viernes anterior, alcanzando su mayor cotización en más de 26 meses, toda vez que la aversión al riesgo por parte de los inversionistas y un escenario de alza de tasas en Estados Unidos fueron elementos que ejercieron presión a la moneda nacional.
Así fue la semana del dólar:
Lunes 22 de septiembre: El dólar estadounidense comenzó la semana con presiones alcistas, toda vez que los inversionistas continuaron asimilando las expectativas de un aumento de tasas de interés por parte de la Reserva Federal (Fed) hacia 2015 y la terminación de su programa de compra de valores, lo que generará una mayor oferta para especular en el mercado de dinero estadounidense. La primera sesión terminó con un alza de 0.33 por ciento frente al peso.
Martes 23: Una demanda de dólares impulsada por factores geopolíticos y datos de debilidad manufacturera en China y la Eurozona generaron ventas de activos financieros con mayor riesgo, lo que influyó al peso para que retrocediera 0.23 por ciento frente al dólar y éste alcanzara su mayor nivel desde el 3 de marzo de este año.
Miércoles 24: El peso tuvo un leve respiro luego de que las dos primeras sesiones de la semana mantuvieron una tendencia alcista. En esta ocasión la moneda nacional se recuperó 0.05 por ciento frente al dólar toda vez que una ola alcista de los mercados accionarios a nivel mundial impulsó la compra de valores en pesos.
Jueves 25: Lo que se consideró como aversión al riesgo y un "fly to quality" impulsó a la divisa estadounidense un 0.71 por ciento frente al peso, ya que el escenario de crecimiento económico de Estados Unidos y por consiguiente un aumento de tasas en el mediano plazo están restando atractivo a inversiones denominadas en monedas emergentes, en donde se encuentra el peso.
Viernes 26: El aumento de tasas en el mercado de deuda de Estados Unidos influyó para que el dólar ganara 0.40 por ciento frente al peso y de esta forma alcanzara su mayor precio desde el 25 de julio de 2012. De hecho, se espera que este aumento de tasas en los Bonos del Tesoro se trasladen a los Bonos de largo plazo en pesos.