Fiscales italianos demandaron este martes a Morgan Stanley por haber manipulado los contratos sobre derivados, causando al país europeo pérdidas por dos mil 700 millones de euros -- tres mil 100 millones de dólares --, ligadas a transacciones de derivados.
Los fiscales tomaron la decisión luego de que una investigación mostrara que contratos sobre derivados fueron manipulados por el banco estadounidense y por funcionarios italianos causando pérdidas al Estado.
Asimismo, señalaron que los contratos negociados eran de naturaleza especulativa y contenían cláusulas extremadamente ventajosas para el prestamista.
La Corte dei Conti, que rige en materia de abuso de fondos públicos, impulsará el caso contra Morgan Stanley en nombre de los contribuyentes italianos.
Al llevarlo a juicio, los fiscales creen que hay posibilidad de desarrollar un caso. Está previsto que las audiencias comiencen en abril del 2018, dijo la fuente. Si se prueba la acusación, un juez podría ordenar a Morgan Stanley pagar una compensación al Gobierno italiano.
"La fase de investigación ha terminado y la corte oirá los reclamos de indemnización", señaló la fuente, que pidió no ser identificada porque no estaba autorizada a hablar públicamente sobre la decisión.
Morgan Stanley rechazó hacer comentarios.
En agosto del 2016, el banco dijo en un comunicado a reguladores que había recibido una propuesta de un fiscal italiano sobre un pago para resolver un problema por transacciones con derivados. Morgan Stanley señaló entonces que el reclamo era infundado.
Las operaciones con derivados se originaron entre 1995 y 2005 y finalizaron entre diciembre del 2001 y enero del 2012, dijo Morgan Stanley en aquella nota.
El caso de la Corte dei Conti se centra en derivados de la tasa de interés acordados entre el Tesoro italiano y Morgan Stanley. Los fiscales en Roma argumentan que algunos contratos negociados eran de naturaleza especulativa y contenían cláusulas extremadamente ventajosas para el prestamista.
El tribunal también demandará a dos altos funcionarios italianos, la jefa de deuda pública Maria Cannata y el titular del Tesoro Vincenzo La Via, y a los exministros Domenico Siniscalco y Vittorio Grilli, por un total de mil 180 millones de euros.