El precio de la mezcla mexicana de exportación hiló su sexta alza de forma consecutiva, subiéndose al repunte observado por el comportamiento en los precios de los crudos referenciales.
Este lunes, el valor del hidrocarburo azteca subió 1.4 por ciento, equivalente a 64 centavos, al fijar su precio en los 46.24 dólares por barril, costo más elevado desde el pasado 1 de marzo cuando llegó a los 46.33 dólares. En las últimas seis sesiones, esta recuperó 3.64 dólares.
Los precios del petróleo continúan impulsados por la situación que prevalece en Siria, la cual eleva el nivel de tensión en Medio Oriente; asimismo, estos son influenciados por las noticias relacionadas con el corte del suministro de un oleoducto en Libia.
Sin embargo, no sólo hubo beneficios para México, también el precio del crudo Brent fue impulsado 0.96 por ciento para cerrar en 55.77 dólares por barril, en tanto que el WTI llegó a los 56.86 dólares tras un repunte de 1.19 por ciento.
De acuerdo con expectativas de la agencia Moody's, se estima que, pese a que se registre un aumento de la producción de petróleo, los precios de los crudos referenciales fluctuarán en un rango de 40 dólares mínimo y hasta 60 máximo, por lo menos hasta 2018.
En su informe Asia Oil & Gas Quaterly, la calificadora anticipa que el aumento esperado de la producción será impulsada por una mayor extracción de crudo estadounidense del tipo shale, cuyos costos de extracción se han reducido pero han registrado un aumento de los pozos en actividad.