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Euro avanza pese a fracaso en reunión Grecia-Eurozona; cotiza en 1.1429 dlrs

Las noticias procedentes de los bancos centrales serán también grandes animadoras de movimientos de la divisas, ya que la Reserva Federal y el Banco de Inglaterra harán públicas el miércoles las minutas de sus últimas reuniones de política.

La divisa europea recuperaba terreno frente a una canasta de divisas gracia a que la percepción de los inversores alemanes se elevó a un máximo nivel en el año, sumado a las esperanzas de que Grecia alcance un acuerdo con sus socios de la zona euro para lograr apoyo más allá de su actual programa de rescate.

Más temprano, el euro se había debilitado, después de que un colapso en las negociaciones para lograr un nuevo acuerdo sobre la deuda de Grecia planteó dudas sobre el futuro del país en la zona euro. Atenas rechazó por "inaceptable" una propuesta para requerir una extensión de seis meses de su rescate internacional.

El euro subía 0.45 por ciento frente al dólar a 1.1405 unidades, cerca de su máximo del lunes de 1.1429 dólares. Asimismo, se recuperaba frente a la libra y operaba en 74.30 peniques, tras cotizar la semana pasada en 73.69 peniques, cerca de su mínimo en siete años.

En tanto, las acciones griegas recortaron pérdidas, mientras el rendimiento de los bonos soberanos a 10 años de Italia y España subía ligeramente, entre esperanzas de que pueda llegarse a un acuerdo en las próximas semanas antes de que Grecia se quede sin dinero.

Lo más probable es que los últimos desarrollos en las negociaciones con Grecia sigan dominando las operaciones cambiarias a corto plazo.

Las noticias procedentes de los bancos centrales serán también grandes animadoras de movimientos en las monedas, ya que la Reserva Federal y el Banco de Inglaterra harán públicas el miércoles las minutas de sus últimas reuniones de política.

El Banco Central Europeo publicará también el jueves las minutas de su reunión de enero, cuando anunció un nuevo programa de compra de bonos en un intento por impulsar el crecimiento y combatir la deflación, pese a la oposición del Bundesbank alemán.

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