En la búsqueda de beneficios ante la posibilidad de una victoria de Trump, los inversionistas en mercados emergentes han encontrado una nueva pareja entre las dos monedas que podrían verse más afectadas por un triunfo del republicano: el rublo y el peso.
Amudi Asset Management ha estado vendiendo al peso y comprando rublos para beneficiarse de la perspectiva de una victoria de Trump, cuyo proyecto de construir un muro en la frontera con México es tan conocido como su admiración por Vladimir Putin. Al grupo financiero británico GAM también le gusta la operación y asegura que está ganando popularidad.
"La compra del rublo frente al peso tiene mucho sentido como un 'Trump Trade'", dijo Paul McNamara, quien supervisa inversiones por seis mil millones de dólares en GAM, incluido el octavo fondo más grande del mundo de bonos de mercados emergentes.
Añadir la compra del rublo a las ventas cortas del peso, que han sido populares desde el verano, impulsa los retornos rumbo a las elecciones de Estados Unidos. La estrategia perdió dinero después de que Trump fuera considerado perdedor en el debate presidencial del lunes, pero aún así, ha ganado un 6 por ciento este mes a medida que ganó el candidato popularidad en las encuestas. Este rendimiento es más del doble que sólo apostar a la caída del peso frente al dólar.
"Necesitaríamos ver un evento sumamente decisivo para 'matar' a este trade", dijo McNamara. "Nos gusta el rublo de cualquier manera, mientras que el peso es mucho más dependiente de la contienda de Clinton contra Trump".
La elección presidencial ha tenido a los analistas luchando para encontrar diferentes maneras de apostar a favor o en contra de una presidencia de Trump. Todo, desde la compra de oro hasta la venta de dólares canadienses y bonos del Tesoro están dentro de la lista.
El miedo de que una presidencia del republicano enturbie las relaciones de México con su mayor socio comercial ha depreciado al peso un 10 por ciento en los últimos seis meses, más que cualquier entre las principales monedas. El rebote post-debate sólo ha dejado una pequeña recuperación de ese largo camino.
Además de las elecciones en Estados Unidos, el rebote en el precio del petróleo ha sido un factor que también ha impulsado al rublo, aumentando su atractivo.
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