De acuerdo con información del Inegi, en su serie original, el índice de confianza del consumidor en el país se ubicó en 84.5 puntos en enero, lo implica su nivel más bajo desde abril del 2010.
El índice presentó una contracción de 15.5 por ciento anual, lo que significó el mayor desplome en casi un lustro y además acumuló cuatro descensos.
En tanto que en datos ajustados por estacionalidad, el índice de confianza se desplomó 6.20 por ciento en el primer mes de año. A su interior, se registraron disminuciones mensuales en cinco de sus componentes que lo integran.
Dentro de los componentes que registraron una mayor caída se encuentra el relacionado con la posibilidad de adquirir viene durables, con un retroceso de 14.86 por ciento con base en datos desestacionalizados.
En el informe se destaca la baja de 3.80 por ciento en las expectativas que tienen los miembros de los hogares de la situación económica dentro de doce meses.
En tanto que el indicador sobre las expectativas sobre la condición económica del país dentro de un año respecto a la situación actual reportó una disminución de 2.14 por ciento.
La débil evolución de la confianza del consumidor adelanta que el ritmo de la recuperación quizá no sea tan fuerte en los primeros meses del presente año.