LONDRES.- Los precios de los metales básicos revirtieron su tendencia bajista de la sesión anterior por un retroceso del dólar frente a las principales divisas, aunque este avance fue limitado por los últimos datos de la balanza comercial de China, que alimentaron temores sobre el crecimiento de la demanda del principal consumidor de metales del mundo.
Por el lado de las exportaciones chinas, estas cayeron más de lo esperado durante noviembre al retroceder 6.8 por ciento anual, en términos de dólares, reportando su quinto mes seguido a la baja, mientras que las importaciones disminuyeron un 8.7 por ciento, su decimotercera caída consecutiva.
Lo que se destaca del informe de la Administración de Aduanas fue que las importaciones chinas de cobre crecieron el mes pasado 10 por ciento en comparación con lo reportado en noviembre de 2014, en parte porque el precio del metal tocó mínimos de más de seis años y alentó compras de oportunidad pese a una menor demanda, sin embargo, esto fue insuficiente para revertir la caída del precio del metal.
Más detalles sobre la demanda china de metales industriales provendrán de los datos de inversión y producción industrial que se difundirán hasta el sábado.
En esta ocasión, el contrato de cobre para entrega a tres meses cerró con un alza de 0.7 por ciento, a cuatro mil 587 dólares por tonelada.
El informe comercial de China también mostró que sus exportaciones de aluminio en noviembre crecieron a 450mil toneladas, igualando el segundo registro histórico más alto y que en cierta forma explica porque este metal continúa sin encontrar su piso.
En este contexto, el precio del aluminio bajó 0.5 por ciento, para llegar a los mil 477 dólares por tonelada, mientras que el zinc cerró sin cambios en mil 531 dólares.
Por su parte, el plomo subió 0.6 por ciento y cerró a mil 697 dólares por tonelada, mientras que el estaño cayó 1.4 por ciento a 14 mil 400 dólares y el níquel perdió 0.6 por ciento, y concluir la sesión en ocho mil 700 dólares por tonelada.
Una gran parte de los operadores espera que la actividad en el mercado siga débil hasta después de la reunión de política monetaria de la Reserva Federal (Fed) la próxima semana, en donde se espera un aumento en el costo de los Fondos Federales, lo que podrá impulsar al dólar y presionar a mayores bajas los precios de los metales.