Mercados

Peso se pone ‘fortachón’ en 2022; desafía al ‘caos’ mundial

La moneda nacional se apreció 0.19% en la sesión del miércoles, de acuerdo con datos del Banxico.

Para sorpresa de muchos analistas, el peso sigue fortaleciéndose y cotiza en su mejor nivel desde febrero de 2020, lo que representa todo un desafío considerando el panorama económico y geopolítico actual.

Factores estructurales de la economía, así como los flujos de divisas por remesas, inversión y exportaciones, además del diferencial de tasas de interés locales con las de Estados Unidos, son los principales elementos que respaldan la solidez de la moneda mexicana.

De acuerdo con información del Banco de México, el tipo de cambio finalizó la jornada del miércoles en 19.3106 pesos, con lo que presentó una apreciación de 0.19 por ciento.

Durante la jornada tocó un nivel máximo de 19.345 unidades y un mínimo de 19.288 unidades.

Con este nivel, la moneda local acumula en el año una apreciación de 5.84 por ciento, y esa es la mayor ganancia para un periodo similar desde 2017.

En ventanilla bancaria, el dólar se vende en 19.83 pesos cada uno, según información de Citibanamex.


El índice dólar (dxy), que mide la fortaleza de la moneda estadounidense frente una canasta conformada por seis divisas de países desarrollados muestra un descenso de 0.05 por ciento, en un nivel de 106.35 puntos.

Asimismo, el índice dólar de Bloomberg (bbdxy) muestra un descenso de 0.04 por ciento, y se ubica en las mil 275.27 unidades.

En el mercado de dinero, el rendimiento del Mbono a 10 años, en México, se coloca en una tasa de 9.49 por ciento, mientras que, en Estados Unidos, el rendimiento del bono a 10 años alcanza un nivel de 3.73 por ciento.

Impulsores estructurales

Ricardo Aguilar, economista en jefe de Invex, indicó a El Financiero Bloomberg que para muchos ha resultado sorpresivo el comportamiento del peso mexicano, que se debe, por una parte a la parte estructural de la economía local, que favorece un tipo de cambio fuerte.

Destacó que el país tiene finanzas públicas sanas, a lo que se suman los sólidos flujos de inversión extranjera directa, y de remesas, que en este año van a superar los 50 mil millones de dólares.

“En general hemos visto factores estructurales, aunado al monto de las reservas internacionales, ligeramente por debajo de los 200 mil millones de dólares, la línea de crédito flexible con el FMI, el hecho de que tengamos todavía una calificación por encima del grado de inversión y un banco central autónomo, y estos son sin duda los datos estructurales que están ayudando al peso a fortalecerse”, dijo. A esto se suma, agregó, el diferencial de las tasas de interés que mantiene el Banco de México con la Reserva Federal de EU, que es muy atractivo.

Gabriela Siller, directora de análisis de Banco Base, coincidió que la apreciación del peso se debe a la mayor entrada de dólares al país por concepto de exportaciones, remesas e inversión extranjera directa y por el diferencial de tasas que ha mantenido el Banco de México con la Fed.

“La apreciación del peso frente al dólar puede explicarse a través de varios enfoques de determinación, mediante el modelo de flujos: se indica que las fluctuaciones del tipo de cambio tienen como objeto equilibrar la oferta y demanda de divisas, que están a su vez determinadas por flujos de comercio internacional. En otras palabras, el tipo de cambio se encarga de mantener en equilibrio la balanza de pagos, compensando los desbalances de la cuenta corriente”, destacó Gabriela Siller, directora de Análisis Económico de Banco Base.

“Bajo este enfoque, los incrementos en la demanda por bienes nacionales, relativo a la demanda por bienes extranjeros, tiende a generar una apreciación de la moneda local. Con esto, en el largo plazo los factores que afectan el tipo de cambio son: precios relativos, preferencias, barreras al comercio, niveles de precios y productividad”, agregó la especialista.

Alain Jaimes, analista bursátil en Signum Research, señaló que la fortaleza reciente del peso está relacionada con una debilidad generalizada del dólar, que se explica por la expectativa de un apretamiento monetario menos agresivo por parte de la Fed. “Lo anterior hace que los inversionistas tengan más apetito por el riesgo y la moneda nacional al ser uno de estos activos, y que se diferencia de sus pares emergentes, es atractiva como fuente de inversión”, agregó.

Tensiones bajo control

Janneth Quiroz, subdirectora de análisis económico en Monex, apuntó que los mercados ya tienen descontado un escenario en el que hay tensiones geopolíticas a lo largo del mundo.

Explicó que desde que estalló la guerra entre Rusia y Ucrania han habido desencuentros por el tema del petróleo, con Estados Unidos pidiendo a los principales productores árabes que incrementaran su oferta; la visita de Nancy Pelosi a Taiwán, entre otros eventos, que revelan una coyuntura compleja. “De momento se percibe que las tensiones actuales no escalaran a algo más, porque si no definitivamente ya hubiéramos visto una reacción más permanente en los mercados”, agregó la especialista.

Ven más fortaleza

Eduardo Ramos, analista de mercados financieros de AFTX LATAM, mencionó que, “hacia cierre de año hay la probabilidad de que el peso pueda avanzar más, pero primero tendría que superar los 19 pesos por dólar para que se ubique en niveles prepandémicos de los 18.50.

Detalló que los datos económicos recientes apoyan la idea de que la Reserva Federal moderará su apretamiento monetario, “al ser datos que están siendo buenos para la economía en general, pero no tanto para el dólar podemos pensar que el billete verde se estará debilitando siempre y cuando la Fed suba 50 puntos base y no 75 en su siguiente reunión”, añadió.

“Si el Banco de México continúa siendo agresivo, inclusive más que el Fed, es muy probable seguir viendo un peso más fuerte; entre mayor sea el diferencial de tasas, la probabilidad de una fortaleza del peso es mayor”, dijo Alain Jaimes.

También lee: