Si estás de antojo y no sabes qué comer, tienes que probar estos peculiares huaraches de 38 centímetros, creación de doña Margarita Tepale.
Hace 20 años, doña Margarita comenzó a hacer huaraches muy grandes y tuvo la idea de que se llamaran Pisadas de King Kong, las cuales ahora dan nombre a su establecimiento.
Son únicas en la Ciudad de México y se elaboran en un molde que doña Margarita mandó a hacer para que cada base fuera igual.
Cada pisada calza 38 centímetros y, según la variedad, pueden pesar hasta tres kilos, suficiente para acabar con el antojo de toda una isla, o bien, de un alma chilanga “de buen comer”.