En febrero próximo la desarrolladora de vivienda Vinte prevé hacer su estreno en la Bolsa Mexicana de Valores (BMV), con una oferta pública inicial de acciones (OPI) por un monto de entre mil 600 y mil 700 millones de pesos, reveló este lunes su director general, Sergio Leal.
Más temprano, la Bolsa mexicana informó de la autorización que pidió Vinte para la OPI.
La llegada de Vinte a la Bolsa Mexicana es parte del regreso de las vivienderas al centro bursátil mexicano, después de que Cadu hizo su oferta pública en diciembre pasado (luego de 12 años que se colocó la última desarrolladora, Sare); en este inicio de año también se espera la entrada de Javer.
La oferta sería el 12 de febrero próximo, aunque sin dejar de observar la volatilidad del mercado, señaló Leal.
Agregó que el 20 por ciento de las acciones se colocarán en Estados Unidos y el 80 por ciento en México.
Los recursos que se obtengan serán destinados a "pagar la deuda más cara que tenemos, bancos de primer piso y vamos a meterla en infraestructura", expresó.
El anuncio se da luego de que el fondo inmobiliario estadounidense propiedad del magnate Sam Zell adquiriera el 7.5 por ciento de la empresa por 25 millones de dólares.
"Es el fondo inmobiliario más grande a nivel mundial y nos dieron un crédito convertible en acciones, se paga con acciones al momento de la colocación. Con él vamos a empezar una etapa más institucional de Vinte, en la bolsa", dijo en entrevista Sergio Leal.
Equity International es el fondo de Zell que invierte en compañías fuera de Estados Unidos. Zell se une así al Banco Mundial y al Banco Interamericano de Desarrollo como inversionistas de Vinte.
La empresa tiene desarrollos en el Estado de México, Hidalgo, Puebla, Querétaro, Quintana Roo y este año espera entrar a Nuevo León.
El directivo comentó que "el gran beneficio que hoy tenemos como país es que México se está convirtiendo en un país manufacturero de clase media" en centros como Monterrey (plaza que abrirá en 2016), León, Querétaro, Estado de México, lo que genera que haya personas con un mayor ingreso.
"Esa gran oportunidad de poderle vender a la gente que está trabajando en la línea de producción, a los directores, gerentes, coordinadores que no ganan el mínimo, sino de 15 mil pesos hacia arriba, esas personas se pueden comprar una casa de 600 mil pesos hasta un millón", mercado que quedó desatendido tras la crisis de 2008, dijo.
De esta forma, "hay mercado, gente trabajando con empleo y un empleo con un puesto relativamente interesante, tienes a los bancos deseosos de poder prestar, a Vinte nos cae como anillo al dedo".
Con información de Notimex
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