Empresas

¿Por qué Prada vende esta 'fea' camisa en más de mil dólares?

La compañía se convirtió en tendencia cuando el actor Jeff Goldblum y el rapero Pusha-T utilizaron la camisa, cuyos estampados fueron definidos por The New Yorker como 'performance art'

La camisa 'bowling' de Prada es tan fea que The New Yorker comentó que usarla es un acto de 'performance art'. La mezcla de estampas llamativas estilo Frankenstein con el motivo de una llama que surge desde el fondo cuesta mil 200 dólares y parece ser la camisa del verano, usada por el actor Jeff Goldblum, el rapero Pusha-T y los blogueros urbanos en las semanas de la moda del mundo entero.

Si el precio te llama la atención, piensa lo siguiente: una versión más cuadrada y abultada con un estampado de plátanos cuesta 500 dólares más. ¿Por qué alguien pagaría mil 700 dólares por tenerla? Porque la banana de Prada es cosa de leyenda y, si no lo sabías, la camisa quizá no sea para ti.

Prada ha vuelto a mostrar crecimiento este año después de tres años de ventas en baja y una caída de las ganancias.

Si bien gran parte de esta transformación se debe a un mercado chino brillante que también levantó al conglomerado francés del lujo LVMH y a la empresa propietaria de Gucci, Kering, se debe asimismo a un esfuerzo por imprimir nueva fuerza a la identidad única de marca que tiene Prada.

La etiqueta volvió a lanzar sus productos más emblemáticos, como las cangureras de nylon, los mocasines con taco, las imágenes de revistas de historieta e inclusive éxitos más recientes como la estampa de bananas.

En comentarios referidos a los resultados del primer semestre, el presidente Carlo Mazzi dijo que Prada está haciendo esfuerzos para "adaptarnos a tiempos que cambian rápidamente y a interpretar el espíritu de las nuevas generaciones sin perder de vista nuestras raíces". La marca incrementó el gasto en medios sociales para que los nuevos clientes se informen sobre su estética, aseguró

Miuccia Prada, la directora ejecutiva, accionista mayoritaria y una de los dos máximos responsables, lleva décadas usando sus diseños estilo chic feo para promocionar una apariencia desenvuelta para iniciados.

Sobre la base de vestidos sin forma de color verde chícharo hasta sandalias de 700 dólares, Prada construyó una empresa con un valor de 3 mil 500 millones de dólares vistiendo a la gente con ropa diseñada para hacerla lucir interesante o desenfadada antes que rica o bella.

Los artículos no siempre atraen demasiado al ojo no entrenado, pero para el mundillo de la moda, usar un look de la pasarela de Prada envía una señal potente: eres parte de la tendencia.

"El talento claro de Prada reside en poder convertirse en deseable sólo para las personas que codicia como clientes", comentó Elodie Nowinski, profesora de estudios sobre moda de la Escuela de Negocios EM Lyon.

En los últimos años, se consideró que la compañía estaba quizá demasiado orientada a los conocedores como para crecer. Así como Gucci usó las redes sociales para impulsar al centro de la escena de la moda la renovación maximalista de la marca de Alessandro Michele, Prada eludió mayormente la esfera digital.

La marca también tardó en tomar conciencia de la importancia de Instagram y vendió una selección limitada de productos online hasta el año pasado.

Ahora, la confianza en la transformación crece entre los inversores. Las acciones subieron casi 40 por ciento en los últimos 12 meses, aunque todavía se negocian aproximadamente a la mitad del valor de su pico máximo de 2013.

Analistas de MainFirst escribieron el jueves que esperan ver acelerarse el crecimiento en lo que queda del año, respaldado por el lanzamiento de otra línea icónica, la colección de Prada inspirada en los deportes, Linea Rossa, reconocible por su etiqueta roja.

También lee: