Empresas

McDonald's está en problemas por un muro... y no es el de Trump

La cadena de comida rápida se encuentra en una disputa por el rediseño de sus sucursales, en los que pretende colocar una barrera en un sitio muy importante de sus instalaciones.

McDonald's tiene sus propios problemas con el muro, literal y metafóricamente hablando.

La compañía de restaurantes más grande del mundo está creando conflictos con sus franquiciados de Estados Unidos al incluir un nuevo muro en su plan de remodelación.

Los dueños de los restaurantes de McDonald's argumentan que colocar un muro entre cajeros y cocinas, con la intención de ocultar equipos de cocina antiestéticos, es un desperdicio de dinero y no ayuda al servicio al cliente ni a las operaciones, de acuerdo con cartas y un correo electrónico al que tuvo acceso Bloomberg News.

"No podemos permitirnos el desperdicio que genera un programa de reinversión 'genérico'", señalaron los franquiciados de McDonald's en una carta este mes a otros operadores de tiendas.

"Debemos permitir a nuestros operadores propietarios recuperar el control de la reinversión que se está produciendo, detener la inversión inútil y problemática (muros SAM), y centrar nuestra reinversión en lo que realmente generará un retorno de la inversión (servicios al paso y cocinas)".

La división muestra cómo el gran impulso de McDonald's para renovar miles de locales en Estados Unidos ha generado problemas en el último tiempo.

En un esfuerzo por estar a la vanguardia de los competidores de comida rápida y mantener las ventas en las mismas tiendas en crecimiento, el director ejecutivo, Steve Easterbrook, está promoviendo remodelaciones que incluyen quioscos de auto pedido, nuevos sistemas para pedidos de entrega y carriles adicionales de servicio al paso en algunos restaurantes.

Sin embargo, hace poco la compañía dijo que retrasará esas renovaciones por varios años para apaciguar a los franquiciados que se han quejado de los costosos cambios.

Los franquiciados poseen más del 90 por ciento de los 37 mil locales de McDonald's a nivel mundial. Los denominados 'muros SAM' (abreviación de modernización del área de servicio), podrían ocultar el equipamiento o una cocina desordenada. Se sincronizan con la iniciativa de la compañía por lucir más exclusiva y su reciente incorporación del servicio de mesa.

Si bien McDonald's no hace comentarios sobre discusiones internas, la compañía está "comprometida a continuar trabajando estrechamente con los franquiciados a fin de que tengan el apoyo que necesitan para administrar excelentes restaurantes y brindar experiencias de calidad y conveniencia para los consumidores", consigna un comunicado de la portavoz, Andrea Abate, enviado por correo electrónico.

Nueva asociación

El año pasado se formó un nuevo grupo de franquiciados de McDonald's para incentivar la "verdadera colaboración" con la empresa matriz.

El grupo, apodado Asociación Nacional de Propietarios, ha celebrado reuniones para discutir preocupaciones tales como el flujo de efectivo y la rentabilidad. El mes pasado, más de mil 200 franquiciados y proveedores de McDonald's se reunieron en Dallas. La clave entre las preocupaciones son las adiciones de remodelación que incluyen el muro en disputa.

Las renovaciones, como un gran muro, pueden ser costosas para los franquiciados, quienes afirman que una pared también podría generar problemas de seguridad, según una encuesta realizada a unos 245 propietarios de tiendas McDonald's a la que tuvo acceso Bloomberg News.

El personal de cocina no podría ver ni el comedor ni a los clientes que entran y salen del restaurante.

En una carta con fecha del 15 de enero, el presidente del grupo, Blake Casper, declaró que los franquiciados deberían detener sus proyectos de remodelación si creen que los muros son una inversión inútil.

También lee: