Minera Frisco fue la única compañía minera de la Bolsa Mexicana de Valores (BMV) que en el 2013 obtuvo resultados positivos, a pesar de la reducción en el valor de los metales y las diversas huelgas dentro de sus minas.
Pese a ello, los inversionistas castigaron a la empresa, la cual tuvo una caída de más de 50 por ciento en su valor de mercado.
El año pasado, Frisco aumentó 14 por ciento sus ventas, mientras que su flujo operativo (EBITDA) se elevó 18 por ciento.
Esto resalta frente al consolidado de las empresas mineras de la BMV, las cuales tuvieron, en promedio, una reducción de 23 por ciento en sus ingresos, así como una caída de 29 por ciento en su flujo.
Sin embargo, el mercado de capitales no reflejó estos resultados positivos, pues en el 2013 el valor de las acciones de la empresa propiedad de Carlos Slim retrocedió de 54.44 a 26.93 pesos por título.
Especialistas destacan que la compañía logró soportar el embate causado por la depreciación de los metales ante la puesta en marcha de nuevos proyectos que casi logran duplicar su extracción de oro.
"A finales del tercer trimestre de 2013, comenzó la mina Concheño, la cual seguirá siendo el principal motor del crecimiento de Frisco. Por este proyecto y otros más, el volumen de producción aumentó 87.4 por ciento", explicó Fernando Bolaños, analista de Monex Casa de Bolsa.
Por otro lado, Rodrigo Heredia, subdirector de Análisis Bursátil de Ve por Más, explicó que fue hasta el cuarto trimestre del 2013 cuando Minera Frisco reportó en sus resultados financieros disminuciones marginales en ventas y EBITDA de 0.4 y 0.5 por ciento, respectivamente. Esto por las constantes huelgas del sindicato minero que inhabilitaron a El Coronel, su proyecto más grande.
José Corona, director de Finanzas de la compañía, explicó en conferencia con analistas que