Al inicio de su administración, Miguel Ángel Mancera dijo que se sustituirían 20 mil microbuses por nuevas unidades, no obstante, hacia 2018 apenas se alcanzará un 30 por ciento de esa meta.
"La voluntad existe y queda mucho trabajo por hacer, me parece que una meta interesante sería por lo menos cambiar un 30 por ciento de ese universo total y dejar ese precedente", afirmó Tanya Müller, titular de la Secretaría de Medio Ambiente del DF en una mesa de discusión organizada por EL FINANCIERO sobre transporte sustentable.
La funcionaria recalcó que los microbuses que se chatarricen serán sustituidos por otro tipo de transporte de bajas emisiones, dentro de un sistema de transporte integrado o incluso, se volverían líneas de Metrobús.
El programa del Gobierno del Distrito Federal (GDF) contemplaba la sustitución total de las unidades que ahora operan con una inversión cercana a los 900 millones de pesos.
Uno de los factores del retraso es el componente político-social, además del financiero, explicó Francisco Quiñones, gerente de Proyectos Ferroviarios y de Transporte Masivo de Banobras.
"Si tu chatarrizas una micro o combi, a lo mucho te darán 16 mil o 20 mil pesos, pero la expectativa de quien lo hace es que le des por lo menos un porcentaje que le permita obtener un autobús de mejor calidad y que deje más flujo, por lo que el problema es quién pone el resto", dijo Quiñones.
Banobras explora alternativas con el Gobierno Federal y organismos internacionales, como el Banco Interamericano de Desarrollo para poner en marcha un programa de chatarrización vehícular.
