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Los ductos de Pemex Refinación están al 90% de su capacidad, por lo que son necesarias inversiones de reconfiguración estimadas en 3,000 millones de dólares, señaló el director general de Pemex Refinación, Miguel Tame Domínguez.
Luego de participar en el XIX Foro de Avances de la Industria de la Refinación, organizado en el Instituto Mexicano del Petróleo (IMP), detalló en entrevista que tal es el caso de algunos sistemas como el del norte que va de Cadereyta a Santa Catarina y de Santa Catarina a Gómez Palacio.
Explicó que a grandes rasgos una reconfiguración que incluye coquizadoras, plantas de hidrógeno o 3 o 4 plantas de hidrotratamiento, cuesta unos 3,500 millones de dólares.
Si se considera que se tienen programadas 3 reconfiguraciones se está hablando de una inversión aproximada de 10,500 millones de dólares, para que las tres refinerías que no tienen el estándar internacional alcancen la competitividad que requieren, señaló.
En cuanto al proyecto de la nueva refinería en Tula, explicó que tiene un horizonte de inversión de entre 11,000 millones y 12,000 millones de dólares, pero a ello habría que sumarle 3,000 millones de dólares del oleoducto que vendría de Dos Bocas al centro del país.
Recordó que el compromiso de Refinación como industria es terminar sus proyectos de modernización en 2017, aunque expuso que en breve es factible que se dé la importación de motores de última generación que utilicen diesel.
Ante esta situación, expuso que la meta es establecer para diciembre de 2014 por lo menos 11 modernizaciones que permitan que 210,000 barriles de diesel se vuelvan de ultra bajo azufre.
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