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La Comisión de Bolsa y Valores de Estados Unidos está investigando si Boeing reveló correctamente los problemas relacionados con el avión 737 MAX, de acuerdo con personas familiarizadas con el asunto.
Esto se debe a que los reguladores intensifican su control de la compañía luego de dos accidentes mortales, según Bloomberg News.
Los dos incidentes ocurrieron con un periodo de cinco meses de diferencia y dejaron 157 y 189 personas muertas, respectivamente.
Los funcionarios de la división de Cumplimiento de la Comisión están examinando si la empresa se comunicó adecuadamente con los accionistas sobre los problemas materiales con el avión, comentaron este viernes las personas, que pidieron no ser nombradas porque la investigación no es pública.
Además, la SEC, como se le conoce por sus siglas en inglés, también está revisando la contabilidad del fabricante de la aeronave para asegurarse de que sus estados financieros reflejen adecuadamente los posibles impactos de los problemas.
La investigación de la Comisión se encuentra en sus primeras etapas y el regulador, que realiza pesquisas sobre la empresas a menudo, por lo regular concluye sin acusaciones de mala conducta.
Aún así, esta acción profundiza la crisis que enfrenta Boeing desde que un 737 MAX se estrelló en Etiopía el 10 de marzo. Ese 'naufragio', que siguió a un mortal accidente de octubre del año pasado en las aguas de Indonesia, provocó que los reguladores pusieran la vista en la firma.
Boeing no hizo comentarios de inmediato, mientras que la portavoz de la SEC , Judith Burns declinó hacer comentarios.
Divulgación atrasada
Boeing ya se ha enfrentado a preguntas sobre el nivel de sus revelaciones. Se dio a conocer el 5 de mayo una declaración donde se menciona que conocía la alerta de cabina no funcionó correctamente durante más de un año antes de que la firma compartiera sus hallazgos con las aerolíneas y con la Administración Federal de Aviación estadounidense.
La empresa hizo el anuncio a sus clientes y a la FAA después del accidente de octubre.
Las autoridades federales han estado realizando una pesquisa legal de la compañía en relación a los incidentes aéreos.
Mientras se analiza el proceso de certificación de los nuevos 737 MAX, la SEC se centra en si Boeing cumplió con sus obligaciones de informar a los inversores como lo hace cualquier firma pública.
Las normas del mercado de valores de Estados Unidos requieren que las empresas informen a los accionistas sobre temas que podrían tener un impacto en sus finanzas, por lo general mediante la presentación de declaraciones con órganos reguladores.
Los problemas asociados con el 737 MAX se centran alrededor de un software de control de vuelo que puede haber contribuido a los repentinos y mortales choques de aviones en Etiopía y cerca de Indonesia. Ambos ocurrieron poco después del despegue.
Boeing mencionó a principios de mayo que el MAX había realizado con éxito más de 200 vuelos con una actualización de software.
Sin embargo, las autoridades de Estados Unidos todavía no han probado ni aprobado las correcciones y no está claro cuándo se permitirá que el avión vuele otra vez.
El jefe interino de la FAA, Daniel Elwell, destacó el jueves en la reunión de reguladores de la aviación de todo el mundo que el avión de pasajeros era "completo y constructivo".
Preservando recursos
A raíz de la puesta a tierra global del 737 MAX, la principal fuente de ganancias de la compañía, Boeing detuvo la participación. de recompras para preservar el efectivo y suspendió la previsión de sus finanzas para este año.
La empresa también reasignó a Michael Luttig, su abogado general y un ex juez del tribunal federal de apelaciones, a un recién creado cargo para asesorar al Ddirector Ejecutivo, Dennis Muilenburg, y directores en todos los asuntos legales relacionados con los accidentes.
"Estamos cooperando plenamente con todos los gobiernos e investigaciones reglamentarias y consultas relativas a los accidentes y el programa 737 MAX ", expuso la compañía en una presentación. "No podemos estimar razonablemente un rango de pérdidas".
*Con la asistencia de Alan Levin y Julie Johnsson.