La nueva NOM-194 que obligará a las armadoras a vender autos con nuevos dispositivos de seguridad esenciales elevará el costo de producción y por ende de los vehículos, pero esto tendrán que absorberlo total o en gran parte las compañías para seguir siendo competitivas en el mercado, dijo Oscar Albín, presidente de la Industria Nacional de Autopartes (INA).
Explicó que la nueva norma exige a los fabricantes de coches que quieren vender autos en el país sumar el sistema antibloqueo de frenado (frenos ABS), frenos de servicio (estabilizador del auto) y el sistema recordatorio de uso de cinturón de seguridad, lo que puede elevar el costo en 120 dólares por vehículo.
"La mayoría de los autos que no tienen ese sistema son subcompactos austeros, que son la mayoría del parque vehicular de 25 millones que hay en el país, ahora se tiene que poner en marcha un plan de chatarrización para cambiar lo más pronto posible estos autos", destacó el directivo.
Sobre este tema, Alberto de Icaza, director de sistema de seguridad de la firma de autopartes ZF México, dijo que a pesar de ser una nueva norma que se aplicará hasta dentro de cuatro años, sigue estando incompleta, pues no considera temas como sistemas de sensores de proximidad, cámaras de reversa, cámara de peatones, sistema de protección de infantes, entre otros.
"Existe la posibilidad de reformar esta norma, por lo que esperaremos que en cinco años se habrá la discusión para mejorar esta nueva regulación", explicó el directivo.
El vicepresidente comercial de Bosch México, Eduardo Watty, dijo que el poner solo frenos ABS puede evitar 20 por ciento de los accidentes viales que hay en el país, mientras que poner un sistema de frenos automáticos puede reducir el 37 por ciento y 12 por ciento el contar con un sistema de estabilidad en el camino.
"La idea de poner una norma de nuevos sistemas de seguridad es que para 2020 los accidentes viales disminuyan a la mitad", explicó el directivo.
DISTRIBUIDORES REFORZARÁN MEDIDAS AMBIENTALES
Agencias de automóviles del país reforzarán sus planes para reducir el impacto ambiental que generan sus establecimientos, que va desde manejo de desechos y consumo eficiente de agua y luz, dijo Guillermo Prieto Treviño, presidente de la Asociación Mexicana de Distribuidores de Automotores (AMDA).
Por ello, la agrupación firmó esta mañana un acuerdo con la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa) que les ayudará en aplicar y consolidar las mejores prácticas en beneficio del medio ambiente y la comunidad, por encima de lo que marca la ley.
"Este acuerdo es un compromiso del sector para continuar protegiendo a la ecología a través de la emisión, manejo y disposición final responsable de los desechos generados por las actividades del sector, convencidos de que esta práctica es una inversión económicamente rentable y un compromiso social", explicó.
Destacó que existe una red de mil 800 distribuidores que estarían aplicando nuevos esquemas legales como el Programa de Liderazgo Ambiental para la Competitividad (PLAC) y Certificación como Empresa Limpia.
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