Pese a que el endeudamiento de ICA se multiplicó 61 veces desde que Alonso Quintana Kawage tomó la dirección de finanzas del grupo en 2007, analistas ubicaron a los factores externos como los mayores causantes de la crisis que enfrenta la constructora.
Según los reportes trimestrales del grupo, el ejecutivo tomó la dirección de finanzas del grupo con una deuda neta de 834 millones de pesos, pero 8 años después, ya como CEO, el pasivo de la constructora había alcanzado los 51 mil 147 millones.
El 2007 fue un año atípico, pues la empresa liquidó al 100 por ciento la deuda del proyecto El Cajón. Pero hacia 2008, el endeudamiento fue de 12 mil 975 millones de pesos y en 2006 de 8 mil 722 millones.
Luego de ocupar el área de finanzas por cuatro años, Quintana Kawage fue director de operaciones de la constructora y desde 2012 es director general.
Para Juan Carlos Minero, director de inversiones de Black Wall Street Capital Partners, la responsabilidad de la 'frágil' situación financiera en la que está ICA es del gobierno. "Cuando llega la actual administración presidencial, la empresa deja de recibir tanta obra pública como lo hizo en gobiernos pasados, dejó de ser la favorita. Cuando llega este gobierno las cosas cambiaron de una manera muy rápida y muy negativa para ICA", indicó.
Fuentes aseguraron a Reuters que varios miembros del Consejo de Administración de ICA presionan para que Alonso Quintana, nieto del fundador, deje la dirección de la empresa.
La semana pasada, ICA anunció su tercer incumplimiento de pago de intereses de sus bonos a largo plazo, a consecuencia de la poca liquidez por la que atraviesa.
"Se tomaron muchos proyectos para que la empresa creciera, esto hizo que la familia Quintana echara mano de la deuda a largo plazo dolarizada, sin embargo, a la mera hora esas intenciones de crecer no funcionaron. Por cómo se dan las cosas, parece ser que las decisiones tomadas no fueron las mejores", comentó un analista que pidió el anonimato.
Agregó que la empresa entró en muchos proyectos en los últimos años, los cuales resultaron no ser tan rentables como se esperaba, tal fue el caso de la Línea 12 del Metro.
"En general, los escenarios no fueron, ni van bien para varios segmentos de negocio de la empresa", añadió el analista.