Economía

Temen que tren rápido afecte calidad de vida en Querétaro

Los habitantes no están de acuerdo con el proyecto porque consideran que no es en beneficio de Querétaro; además, piden que se realice una consulta popular para determinar la ubicación de la termina.

QUERÉTARO, Qro.- Cuando en la ciudad de Querétaro se habla del proyecto del tren rápido, paradójicamente la movilidad es una de las principales preocupaciones que salen a flote.

El delegado de la Secretaría de Comunicaciones y Transportes (SCT), Juan Vázquez Herrera, asegura que son dos los puntos que se están analizando para ubicar la terminal del tren; sin embargo, en documentos oficiales sólo se menciona uno y es la llamada terminal Bernardo Quintana, en la colonia Balcones del Acueducto, donde convergen las colonias Calesa y Hércules.

Colonos, empresarios y vecinos de comunidades aledañas, como San Javier, Lomas de Querétaro, Álamos secciones I y II, se han manifestado de diversas maneras para exigir que la terminal no sea instalada en ese lugar porque temen que resultará afectada su calidad de vida.


En un encuentro con legisladores locales y el delegado de la SCT, la representante de los habitantes de la colonia San Javier, Irlanda Riveroy, expuso que la calidad de vida va en función del tiempo de trayectos que se hace para el traslado de un lugar a otro. "La movilidad en la zona es nula, por los cuellos de botella en circuito Álamos, Universidad, Los Arcos", dijo.

Francisco Borbolla Alegría, en representación de Álamos I y II, solicitó que se haga una consulta popular abierta para decidir en dónde establecer la terminal.

Recordó que la sección I y II de Álamos fueron concebidas como zona residencial, "para que se tuviera calidad de vida no cantidad de plusvalía, a nosotros no nos interesa la plusvalía, sino que se nos respeten los derechos adquiridos en una vivienda que nos costó a algunos mucho trabajo adquirir".

En entrevista, el vocal de la mesa directiva de la Asociación de Colonos de Calesa. José Armando Sánchez Lemus dijo que los habitantes de la zona no están de acuerdo en que se construya la estación del tren entre las colonias Calesa y Bosques del Acueducto. "Uno de nuestros temores es la inseguridad porque va a haber mucha gente en esta zona".

Carlos Macías, otro vecino de Calesa dijo que además de los problemas vehiculares, les preocupa que con el trazo de las nuevas vías desaparezcan sus casas.

Marisela Pérez Martínez, habitante de Hércules y posible afectada del proyecto del tren rápido, aseguró que empleados de Prontier -empresa española que desarrolla proyectos ferroviarios-, ya realizaron en la zona trabajos de topografía.

Dicha empresa, aseguró, les ha mostrado croquis que marcan el derecho de vía que adquirirán para la construcción de una estación en la zona.

Carlos Pescador, coordinador general del Consejo de Desarrollo Urbano de los Consejos de Participación Ciudadana, consideró que el tren es un mecanismo de movilidad y transporte fundamental para quienes hoy viajan una o dos veces por semana a la Ciudad de México; pero el proyecto contiene aspectos que preocupan, y uno de ellos es que se quiera vender la idea por parte de las autoridades –como lo ha comentado el delegado de la SCT-, de que se tratará de una estación pequeña, que no albergará a muchas personas.

Se trata, añadió, de un proyecto que a futuro se conectará con el occidente y norte del país, por lo que es innegable que no será una pequeña terminal de trenes. Es necesario que se avance en la reestructuración de la movilidad interna, exigió.

Es importante trabajarlo conjuntamente con la sociedad, añadió, "porque el proyecto, donde se ponga, sentará un precedente de lo que será Querétaro y la forma de movernos".

Como autoridad representante del distrito, el diputado Alejandro Cano solicitó a la SCT en Querétaro que se continúe generando mesas de diálogo con la comunidad de aquí hasta que se concluya el proyecto. "Lo preocupante es cómo se van a desfogar los 23 mil pasajeros que se podrían estar transportando diariamente."

Además del tema del impacto vial, preocupa a los vecinos de la zona que el arribo y paso de tal número de personas derive en actividades que generen inseguridad para quienes ahí habitan.

El delegado de la SCT en Querétaro, Juan Vázquez, asegura que el problema real es la desinformación, porque hasta ahora no hay una decisión tomada y se continúan realizando los estudios de impacto en la Ciudad de México. Comentó que según estos estudios, por ejemplo, se ha establecido que los cines ubicados en Álamos II sección, ubicado en Plaza Boulevares (que intersecta también con Bernardo Quintana) mueve más gente por hora pico -9 mil personas- que lo que va a mover el tren.

Pero además, dijo, vendrán junto con el tren obras e infraestructura nueva. Es un proyecto que se está trabajando con Obras Públicas del estado y con el municipio para ver en qué forma se genera toda esta movilidad.

"Querétaro ya no se puede frenar, con tren o sin tren", concluyó el funcionario.

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