Ayer fue presentada la primera subasta eléctrica de mediano plazo, la cual abre la oportunidad para suministradores diferentes a CFE de atender a pequeñas y medianas empresas, así como a usuarios residenciales.
Marcelino Madrigal, comisionado de la Comisión Reguladora de Energía (CRE), afirmó que esta primera subasta está diseñada para dicho fin.
"Es un instrumento que será de utilidad para pequeñas y medianas empresas, así como para el suministro básico (residencial).
"Son de fácil acceso a empresas medianas y pequeñas, y lo que hará es que democratizará más las opciones que tienen los usuarios eléctricos para elegir entre diferentes opciones de suministro", señaló el funcionario.
Se trata de una subasta en la que la Secretaría de Energía (Sener) y el Centro Nacional de Control de Energía (Cenace) determinaron que haya compradores de todo tipo: esto implica comercializadores, suministradores, generadores y usuarios calificados.
A diferencia de las otros procesos eléctricos (dos ya concluidos y uno en marcha) esta tendrá contratos a uno, dos o tres años, lo que a la industria le "abrirá los ojos" con respecto a los precios de la electricidad en el mediano plazo, dijo Enrique Giménez, director para México de Fisterra Energy.
"Este proceso es muy importante porque en resumen, lo que no se puede medir no se puede gestionar.
Nos va a dar una visión de cuánto cuesta la electricidad a un año a dos años a tres años", señaló el ejecutivo.
Pedro Joaquín Coldwell, secretario de Energía, dijo que la subasta, cuyas bases en su versión preliminar estarán listas a finales de este mes, quedará abierta a cualquier tipo de tecnología.
"En esta ocasión el proceso será mucho más flexible y cualquier participante será comprador y vendedor" detalló.
El fallo quedará listo para febrero de 2018, toda vez que las empresas deberán entregar sus ofertas de compra desde el 30 de noviembre de este año, y las ofertas de venta se entregarán el 31 de enero de 2018.
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