Economía

Sí, pero no, dice Fitch a nueva ayuda del Gobierno de López Obrador a Pemex

La calificadora estima que Pemex requiere una menor carga tributaria para que retenga la suficiente generación de flujo de efectivo interno para reinvertir en su negocio principal o para pagar la deuda.

Si bien los anuncios realizados la semana pasada por el Gobierno para reducir la carga fiscal de Petróleos Mexicanos (Pemex) va en la dirección correcta, aún son insuficientes para estabilizar su calidad crediticia, indicó la agencia de calificación crediticia Fitch.

En un documento firmado por el director sénior de Fitch, Lucas Aristizabal, la calificadora señaló que las medidas fiscales representarían una reducción de mil 100 millones de dólares o el equivalente al 3.7 por ciento de las transferencias totales al Gobierno en 2018, que, sumadas a los 400 millones de dólares anunciados en 2017, solo ayudarán "moderadamente" a Pemex a reducir su carga fiscal.

"Fitch estima que Pemex necesitaría que sus impuestos se redujeran en no menos del 50 por ciento para que la compañía retenga la suficiente generación de flujo de efectivo interno para reinvertir en su negocio principal o para pagar la deuda", indicó.

La firma espera que el apoyo total del Gobierno para Pemex para 2019 ascienda a aproximadamente 5 mil 500 millones de dólares, incluida esta última reducción de impuestos, así como las exenciones fiscales anunciadas anteriormente, una inyección de capital y una amortización anticipada de los bonos del Gobierno otorgados para pagos de pensiones.

"Después de compensar estas contribuciones de las inversiones presupuestarias posteriores en una nueva refinería de 50 mil millones de pesos para 2019, estas medidas representan aproximadamente un 10 por ciento de reducción de impuestos o aproximadamente 2 mil 900 millones de dólares, que se comparan desfavorablemente con aproximadamente 27 mil millones de dólares de transferencias al Gobierno durante 2018", dijo Fitch.

El viernes 24 de mayo se firmó un decreto para aumentar los límites de costos que determinan la cantidad de gastos e inversiones que un campo puede deducir de los ingresos gravables para la producción que no excedan los 250 mil barriles diarios.

México busca con esto un recorte fiscal de hasta 138 mil 700 millones de pesos para Petróleos Mexicanos en 2020 y 2021, de acuerdo con un documento enviado a Bloomberg por Octavio Romero, director general de Pemex.

Los recortes graduales se espera que reemplacen a una propuesta anterior de transferir 7 mil millones de dólares para Pemex del Fondo de Estabilización de Ingresos Petroleros, conocido como FEIP, Romero dijo a Bloomberg en una entrevista el 16 de mayo.

Los recortes fiscales se sumarían a la firma de un crédito sindicado de 8 mil millones, de los cuales 2 mil 500 millones de dólares pagarán deuda actual y 5 mil 500 millones reemplazarán algunas líneas de crédito anunciado por el Gobierno a inicios de mayo.

La agencia calificadora Fitch Ratings recortó en enero en dos escalones las notas de los bonos de Pemex y las colocó en perspectiva negativa, dejándolas al borde de perder el grado de inversión.

De acuerdo con la calificadora, la baja en las notas de escala internacional en moneda extranjera pasó de 'BBB+' a 'BBB-'.

También lee: