El conjunto de indicadores del sector manufacturero en México mostraron en mayo una desaceleración generalizada. Ya que, si bien, éstos mostraron aumentos respecto a igual mes del año pasado, las tasas de crecimiento para el periodo se ubican por debajo de las que han mostrado desde el cierre de 2014.
Según indican datos de la Encuesta Mensual de la Industria Manufacturera (EMIM), a través del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi), tanto el personal ocupado, las horas trabajadas, y las remuneraciones medias reales, con sus respectivos aparatados, siguieron está tendencia de moderado avance.
El personal ocupado por la industria a lo largo del mes describió un aumento anual de 2.8 por ciento, luego de que durante los primeros cuatro meses del año esta comparación promediara un alza de 3.2 por ciento. Frente al mes de abril, el número de ocupados descendió 0.1 por ciento, lo que señala la primera caída para este apartado en casi dos años.
Dentro de éste, el número de obreros y empleados aumentó de forma anual 3.0 y 1.8 por ciento, correspondientemente, mientras que de forma mensual los obreros mostraron caída de 0.3 por ciento, mientras que en el caso de los empleados su ocupación permaneció sin cambios en el mes, con lo que éstos hilan dos meses sin cambios en su actividad.
En cuanto a las horas de trabajo del sector, se tiene registro de que aumentaron 1.9 por ciento respecto a mayo del año pasado, pero en comparación con abril éstas bajaron 1.7 por ciento, su primer descenso en lo que va del año. A su interior, la jornada laboral de obreros y empleados cayó mes con mes 1.7 y 1.1 por ciento, respectivamente luego de ambos renglones reportaron aumentos en el trimestre previo.
Por su parte, las remuneraciones medias reales percibidas por los trabajadores de la industria apuntaron una marginal caída durante el mes de 0.02 por ciento, con lo que se acumula un bimestre en esta tendencia de números rojos. Respondiendo al balance mensual, éstas aumentaron 0.1 por ciento, recuperándose luego de dos meses de descensos.
Los salarios (pagados a obreros) mostraron la tasa de crecimiento más baja de los últimos cuatro meses con un incremento de 0.6 por ciento anual; en tanto, los sueldos (pagados a empleados) y las prestaciones sociales registraron variaciones anuales 0.8 y de -0.3 por ciento, respectivamente. Así estas últimas hilan dos meses de disminuciones.
Los salarios acumularon este mes tres periodos de caídas mensuales al bajar 0.1 por ciento respecto a abril, mientras que los sueldos reportaron una variación de 0.9 y las prestaciones -0.3 por ciento, la peor caída en prestaciones en nueve meses.