CIUDAD DE MÉXICO.- Los casos de robo de identidad representan hoy, desde el punto de vista financiero y estadístico, un "foco amarillo" que podría convertirse en un "foco rojo".
En cinco años las reclamaciones imputables a robo de identidad pasaron de ser el 0.4 por ciento del total a representar actualmente el 1.5 por ciento de todas las reclamaciones que se hacen en contra de los bancos, explicó Mario Di Costanzo, presidente de la Comisión Nacional para la Protección y Defensa de los Usuarios de Servicios Financieros (Condusef).
"La alerta es por el crecimiento y las implicaciones sobre la justicia hacia las personas, ya que no sólo es la molestia de que a una persona se le roba la identidad, sino todo el tiempo que tiene que invertir para limpiar su historial en el buró de crédito, en defenderse, aun cuando sea de la mano de la Condusef quita tiempo, es un proceso de tres a seis meses en el mejor de los casos".
Detalló que los casos de robo de identidad implican también repercusiones fiscales, que es la parte que le preocupa al Servicio de Administración Tributaria (SAT), porque a lo mejor se está cometiendo una injusticia de fincar un crédito fiscal a una persona que le robaron la identidad, le abrieron cuentas, pasó dinero por ahí y se le está cobrando a una víctima de robo de identidad.
"Hay temas de justicia y daños a la sociedad e instituciones, por los bienes que pudieron haber adquirido y créditos otorgados por bancos que no pagará nadie y afecta a todos", dijo.
En entrevista con El Financiero, detalló que el robo de identidad también ha dado pie a una variante de fraudes que pueden involucrar muchas vías de productos financieros, ya que se puede abrir una cuenta para un banco o robar la identidad y hacer transferencias para defraudar vía SPEI.
Di Costanzo confirmó que diferentes autoridades trabajan en la elaboración de un manual de prevención para que el usuario sepa anticiparse y no ser víctima de este delito. En el caso de aquellos que ya son afectados, un manual para saber los pasos a seguir para las denuncias.
"Se está trabajando en el ABC para evitar este delito y saber qué hacer en el caso del robo de identidad. También trabajamos en un convenio entre autoridades para intercambiar información y ser más rápidos en comunicarnos para actuar de forma más eficiente".
PREOCUPA REPUNTE
El presidente de la Condusef reconoció que es preocupante el ritmo de crecimiento que muestra este delito.
Aunque por casos, al compararlo con el número total de reclamaciones pueden considerarse pocos, lo grave, dijo, "es la tasa de crecimiento que ha tenido, no queremos que se convierta en un problema o siga creciendo, por eso estamos tratando de que se controle y se trabaje en la cultura de la prevención".
La Condusef reconoce que para la apertura de cuentas de débito es muy complicado que la persona se dé cuenta si es víctima de un robo de identidad, por lo que recomienda revisar los estados de cuenta que recibe.
En el caso de créditos es más sencillo identificar si existen productos como tarjetas de crédito nuevas o créditos o servicios solicitados a su nombre, y esto se hace checando al menos una vez al año el Buró de Crédito, en donde se solicita el reporte especial.