La refinería Antonio Dovlaí Jaime, ubicada en el puerto de Salina Cruz, Oaxaca, la mayor del país, está operando normalmente luego de recuperarse de un incendio registrado a finales de noviembre, en el cual la petrolera estatal Pemex reportó ocho lesionados y según operadores causó una baja en la producción de la planta.
Un funcionario de Pemex dijo el martes que las operaciones de la refinería, con capacidad para procesar 330 mil barriles por día (bpd), habían vuelto a la normalidad.
El 24 de noviembre Pemex informó que controló un incendio en Salina Cruz, en el sureño estado de Oaxaca, y que la planta operaba con normalidad salvo por su planta de alquilación.
Sin embargo, operadores del mercado comentaron que el incidente provocó interrupciones en su operación.
La publicación energética Energy News Today reportó este mes que una de las dos unidades de 165 mil barriles por día (bpd) de Salina Cruz reinició operaciones recientemente después del incendio, pero que la planta de alquilación, dañada por el fuego, seguirá en reparación hasta febrero.
Pemex cuenta con seis refinerías en México con una capacidad de procesamiento de crudo de 1.576 millones de bpd.
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