Las empresas IEnova y Lewis Energy Group se inconformaron por los tiempos que se fijan en los permisos de importación y exportación de hidrocarburos, excluyendo el petróleo crudo, que a partir del año entrante se otorgarán por entre tres meses y un máximo de un año, con posibilidades de renovación, lo que fue calificado por las compañías como inoperante.
Las firmas piden que cuando menos los plazos queden entre 10 y 30 años.
"El plazo de tres meses (…) prorrogable hasta por un año para los permisos de importación y exportación resulta inoperante para comprometer inversiones considerables en la infraestructura necesaria para llevar a cabo la actividad de importación o exportación, ya sea de ductos o terminales", argumentó IEnova al emitir su opinión a la Comisión Federal de Mejora Regulatoria (Cofemer).
En los próximos años las empresas productivas del Estado: Comisión Federal de Electricidad (CFE) y Petróleos Mexicanos (Pemex) desplegarán cerca de una veintena de gasoductos, que significarán una inversión estimada de poco más de 6 mil millones de dólares, de acuerdo con las propias cifras de ambas compañías.
En el desarrollo de los gasoductos se abrirá la participación a empresas privadas especializadas en el transporte.
IEnova criticó que la vigencia establecida de tres meses y hasta un año, parecería sugerir que el transporte de los hidrocarburos se realiza en carro-tanques o cilindros, cuando el método más eficiente para transportarlos son por ductos y terminales marítimas, que requieren capital considerable.
"Es por eso que sugerimos que las actividades de importación y exportación por medio de ductos o terminales marítimas puedan realizarse con permisos con vigencia igual a la de los permisos de la infraestructura por medio de la cual se realizará la actividad, es decir, por lo menos 30 años", expuso IEnova.
Lewis Energy Group propuso que en los permisos de importación y exportación se establezcan términos de vigencia similares a los de los contratos de exploración y extracción, que podrían alcanzar los 25 o 30 años, o cuando menos que se considere una vigencia de 10 años.
Además pidió que se contemple la posibilidad de llevar a cabo una renovación automática de los permisos.
"La resolución establece que el permiso para la exportación de gas natural y otros hidrocarburos tendrá un término máximo de un año, lo cual si se toma en cuenta que los proyectos para la producción de gas natural tienen una vida útil de 15 años o más, limita cualquier interés para inversiones a largo plazo", opinó Lewis Energy Group, al exponer sus puntos de vista a Cofemer.
Además IEnova aseguró que existe incertidumbre sobre las puntuales bases para negar la autorización de los permisos, lo que atenta contra el desarrollo de proyectos futuros de infraestructura para llevar a cabo la importación y exportación de los hidrocarburos.
Las empresas consideraron que la inversión en activos fijos y la necesidad de obtener financiamientos en un horizonte de largo plazo, hace necesaria la certidumbre regulatoria de largo plazo.