Economía

ONU pide eliminar un billón de dólares en deuda de países en desarrollo por crisis del COVID-19

A través de la Conferencia de Naciones Unidas sobre Comercio y Desarrollo, el organismo propuso 3 acciones para que la actual pandemia no cause desastres económicos en estos países.

La Conferencia de las Naciones Unidas sobre Comercio y Desarrollo (UNCTAD) de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), propuso tres acciones a la comunidad internacional con el objetivo de que la crisis sanitaria del COVID-19 no cause mayores estragos económicos para los países en desarrollo.

Una de estas propuestas consistió en que los países más pobres reciban un alivio de su deuda y sean partícipes de programas de reestructuración. Específicamente, el informe sugiere la cifra de un billón de dólares como medida de condonación necesaria para evitar un desastre económico en los países en desarrollo.

"Se requiere de manera urgente un conjunto de medidas más sistemáticas, transparentes y coordinadas de condonación generalizada de la deuda de los países en desarrollo", señaló el informe de la UNCTAD.

A manera de contexto, el pasado 13 de abril, el Fondo Monetario Internacional (FMI) perdonó los pagos de deuda que le debían los 25 países en desarrollo más pobres durante los próximos seis meses. Se estima que el monto de esta deuda perdonada oscila los 215 millones de dólares.

En tanto, el 15 de abril, los líderes del Grupo de las 20 principales economías del mundo (G20) anunciaron la suspensión del pago de servicio de la deuda de los 73 países más pobres desde mayo hasta el fin del año.

"La comunidad internacional debería tomar medidas de manera urgente para aliviar la creciente presión financiera que el pago de la deuda ejerce sobre los países en desarrollo mientras se enfrentan el choque económico que conlleva el COVID-19", indicó el secretario general de la UNCTAD, Mukhisa Kituyi.

Otra de las medidas que propuso la agencia de la ONU fue la de suspender temporalmente los pagos de deuda para los países en desarrollo, con el objetivo de brindar un 'respiro' y poder liberar recursos para atender la actual pandemia.

La tercera medida consistió en establecer una autoridad internacional para supervisar la implementación y para sentar las bases institucionales y regulatorias que guiará las reestructuraciones de deuda soberana en el futuro.

Los pagos de deuda para los países en desarrollo son 'agobiantes'. Tan solo en 2020 y 2021, los desembolsos destinados al pago de la deuda pública externa se estiman en casi 3.4 billones de dólares.

También lee: