El volumen de la producción minerometalúrgica en México cayó al cierre de 2016 por primera vez desde 2009, año en el que se resintieron los efectos de la Gran Recesión. Ésta además de ser la primera baja en siete años, es la de mayor volumen desde 2002.
Las series originales del Inegi apuntan a que la reducción en la producción de metales preciosos, metales industriales no ferrosos, metales y minerales siderúrgicos y minerales no metálicos durante el año pasado, se redujo en comparación con 2015 en 6.3 por ciento en términos acumulados.
De los 17 metales y minerales producidos en el país, 14 vieron reducida su producción al cierre de 2016. La producción de barita fue la más recortada en el transcurso del año, con un descenso de 26 por ciento, con lo que describió la mayor caída desde 1998.
El volumen producido de coque cayó 23 por ciento y la de azufre 21 por ciento, para estos productos las reducciones de 2016 destacan como las más hondas en 14 y 23 años, respectivamente.
La producción de oro y plata, en la que México es líder a nivel mundial, se contrajo en 9.8 por ciento en el caso del oro; y en 6.2 por ciento para la plata. Dichas cifras enmarcan los peores resultados para la producción de oro en 15 años y para la producción de plata desde 1999.
Los únicos tres metales y minerales que expandieron su producción fueron la diatomita, cuyo volumen de producción fue 3.6 por ciento mayor en cifras acumuladas, el cobre con un alza de 2.4 por ciento y la fosforita con un incremento marginal de 0.4 por ciento.
Economía