CIUDAD DE MÉXICO.- Ajeno a las leyes para el sistema financiero, pero íntimamente relacionado, los delitos cometidos contra migrantes -secuestro, trata de personas con fines sexuales y laborales, extorsión y amenazas-, son otro "caldo de cultivo" para el lavado de dinero.
Nadia Nehis, coordinadora de Incidencia de Scalabrinianas: Misión para Migrantes y Refugiados (SMR), explicó que entre más dificultad se tenga para migrar, mayor será la incidencia de extorsiones y secuestros, de la corrupción y de la impunidad, por lo tanto, es aquí donde se cruza el tema de lavado de dinero y el tema de migración.
En el merco del Tercer Encuentro de Prevención de Lavado de Dinero, organizado por TM Sourcing, Nehis detalló que en materia de secuestros, los familiares de migrantes pagan en promedio entre tres mil y diez mil dólares en un rescate, los cuales son pagados mediante empresas de envío de remesas.
"Es en este punto es en donde nos preguntamos, qué pasa con ese dinero. Es aquí donde se cruzan los temas del lavado de dinero y migración", aseveró Nehis.
"Es muy importante la Ley Antilavado en entidades financieras. Sin embargo, si no se hace algo de raíz, será imposible empujar un proceso para erradicar o aminorar el lavado de dinero".
El delito de lavado de dinero representa entre 2 y un 5 por ciento del Producto Interno Bruto (PIB) mundial, precisó José Ramón Marroquín, director de Contraloría Interna de Nacional Financiera.
Mientras que en México, sostuvo, entre el segundo trimestre de 1993 y al cierre de junio de 2009, en promedio el lavado de dinero representó 1.68 por ciento del PIB nacional.
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