La masa salarial creció 3.8 por ciento real en el primer semestre del año, reportando su mayor alza para igual periodo desde 2007. Este comportamiento ha sido apoyado por la inflación contenida y un mayor dinamismo del mercado laboral.
Sin embargo, analistas anticiparon una desaceleración en el crecimiento de la masa salarial en la segunda mitad del año ante posibles presiones de los precios, sobre todo por alzas en los energéticos, y una moderación en el ritmo de generación de empleos.
Joan Domene, economista del Banco Invex expuso que "ha habido un aumento en la masa salarial que está apoyando el consumo".
No obstante, advirtió que el dato del PIB refleja que la masa salarial "podría haber tocado el techo, o le queda muy poco para hacerlo".
"Ya vimos en junio que la creación de empleo fue menor que la de ese mes del año pasado", anotó.
De acuerdo con datos del Inegi, la masa salarial creció casi 4 por ciento en el segundo trimestre del año por un alza de dos por ciento del salario real de los trabajadores y de 1.9 por ciento anual en el número de ocupados.
Por su parte, Jorge Gordillo, director de análisis económico de CIBanco afirmó que "la reforma en telecomunicaciones ayudó bastante a la inflación".
Agregó que el buen momento de la masa salarial se explica por el consumo interno, pero anticipó que no durará mucho tiempo, "por eso importa mucho que mejore la industria, para generar solidez y evitar una desaceleración fuerte del consumo".