La Central de Abastos de la Ciudad de México mantendrá sus tarifas de diversos servicios para así reducir el impacto a los precios de los productos que comercializa que pudieran verse afectados por el incremento a los combustibles.
Las medidas tocarán desde servicios como el estacionamiento, la entrada y los sanitarios, que son utilizados por las personas que acuden a la central a comprar bienes, tanto a las cuotas de mantenimiento y pernocta para los permisionarios del mercado.
"Sabemos que con el incremento de los combustibles, todos y cada uno de los comerciantes y distribuidores de los alimentos que consume la población de la ciudad tienen que trasladar sus mercancías y, al hacerlo, van a tener que cubrir un mayor costo por ese traslado", dijo el Jefe de Gobierno, Miguel Ángel Mancera, durante la firma de un convenio con autoridades de la central para garantizar estas medidas.
Sin embargo, algunos productos comercializados en este mercado, el más grande del mundo, ya han visto incrementar sus precios. Es el caso del pollo entero, cuyo valor se ha incrementado 9 por ciento, según un análisis del Grupo Consultor en Mercados Agrícolas (GCMA).
Actualmente, la cuota de entrada de la central es de 10 pesos.
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