La inversión extranjera directa entre Estados Unidos y China podría ser entre dos y cuatro veces más grande que lo que muestran los datos de ambos gobiernos, según un análisis de Rhodium Group de los negocios realizados entre 1990 y 2015, que fue publicado en un informe conjunto con el Comité Nacional sobre las Relaciones de Estados Unidos y China.
Casi 6 mil 700 inversiones estadounidenses en China durante esos 25 años tienen un valor combinado de 228 mil millones de dólares, concluyó Rhodium, mucho mayor que la estimación de 75 mil millones del Departamento de Comercio de Estados Unidos o de 70 mil millones del Ministerio de Comercio de China.
Las mil 200 transacciones de China durante esos años alcanzan un valor conjunto de 64 mil millones, eclipsando la cifra de 41 mil millones del Ministerio de Comercio chino y los entre 15 mil millones y 21 mil millones del Departamento de Comercio estadounidense.
El año pasado por primera vez las compañías chinas invirtieron más en Estados Unidos que las firmas estadounidenses en el país asiático, lo que subraya la evolución de las dos economías más grandes del mundo.
La integración económica "es mucho más grande de lo que sugieren las estadísticas oficiales", dijo Thilo Hanemann, economista de Rhodium que administra el trabajo de la consultora en inversión y comercio global y uno de los autores del informe. "Eso significa que los costos a ambos lados de las fricciones proteccionistas son mucho más altos de lo que se asume comúnmente".
La inversión extranjera china creció 53 por ciento a 961 mil 900 millones de yuanes (140 mil millones de dólares) en los primeros 10 meses de 2016 respecto de igual período del año pasado, informó el jueves el Ministerio de Comercio del país asiático. La inversión extranjera directa en China se incrementó apenas 4.2 por ciento en la misma comparación, a 666 mil 300 millones de yuanes.
La inversión estadounidense en China se disparó 80 por ciento en los primeros 10 meses del año, mientras que el dinero chino destinado a Estados Unidos escaló un asombroso 174 por ciento.
Las compañías estadounidenses emplean a más de 1.6 millones de trabajadores en China, mientras que la inversión china genera más de 100 mil empleos en Estados Unidos y los beneficios se expanden a más del 90 por ciento de los estados estadounidenses y las provincias chinas, según Rhodium.
"Los beneficios locales han sido enormes", escribieron en su informe las entidades neoyorquinas.