Millones de mexicanos pagan por todo, desde alimentos hasta medicamentos, con efectivo de familiares que trabajan en los Estados Unidos. Ahora, ese dinero podría permitirles obtener préstamos para autos en un país donde una amplia franja de la población no tiene acceso al crédito.
Nissan Motor Co. de Japón y su brazo financiero local dijeron este mes que comenzarán a otorgar préstamos a mexicanos que tengan a su familia en los Estados Unidos como cosignatarios y que puedan demostrar que reciben remesas con regularidad.
La medida facilita la obtención de crédito en un país donde más de la mitad de los habitantes trabaja en empleos que no son gravados por el Estado -lo cual dificulta a millones de personas comprobar ganancias- y a quienes los bancos no suelen prestar.
Sólo 39 por ciento de los mexicanos tenían cuentas bancarias en 2014, en comparación con 94 por ciento en los Estados Unidos, según datos publicados por el Banco Mundial en abril.
"Si los bancos reciben solamente a potenciales clientes con un ingreso regular en un empleo formal, el crédito seguirá siendo pequeño y estará saturado en esas áreas", dijo Alexis Milo, economista principal para México en Deutsche Bank AG. "Hay una serie de clientes potenciales que no son aprovechados".
El programa de préstamos, conocido como "Sin Fronteras" da a Nissan, la línea de autos más popular del país, acceso a posibles clientes en un momento en que las ventas automotrices están creciendo.
La campaña de financiamiento también tiene lugar en momentos en que los trabajadores migrantes en los Estados Unidos aprovechan la caída del peso para enviar más dinero a sus parientes.
A noviembre, las remesas llegaron a 22 mil 600 millones de dólares, el nivel más alto desde 2008, según el banco central. Los Estados Unidos han sido históricamente el origen de más del 95 por ciento de dicho dinero.
Las remesas han generado la cólera de Donald Trump, el candidato favorito a presidente del Partido Republicano.
Trump amenaza con incautarlos como parte de una política migratoria que incluye obligar a México a pagar por un muro a lo largo de su frontera con los Estados Unidos para impedir el ingreso ilegal.
BBVA Bancomer SA estima que la mayor parte del dinero proviene de trabajadores indocumentados. Los mexicanos en los Estados Unidos ya pueden realizar pagos hipotecarios al banco estatal Infonavit desde el norte de la frontera, según el sitio web del prestamista.
Andrés de la Parra, máximo responsable ejecutivo del prestamista financiado por Nissan, NR Finance Mexico SA, estima que más de 24 millones de personas en los Estados Unidos envían dinero a parientes en México. Los 4 mil a 5 mil préstamos que NR Finance espera realizar en 2016 conforme el nuevo programa "está tomando apenas una pequeña muestra de esta gran demanda y mercado potencial que existe", dijo.
Los préstamos respaldados por remesas pagarán una tasa de interés anual de 18 por ciento, dijo de la Parra. La tasa de interés promedio ponderada sobre los préstamos para automóviles de bancos monitoreados por Banco de México era de 12 por ciento en agosto de 2014, según los datos más recientes disponibles.
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