Los ingresos tributarios del sector público aumentaron en términos reales 8.7 por ciento anual, el mejor avance desde abril de este año, lo que se debe a un repunte en la recaudación del Impuesto al Valor Agregado (IVA) y una pausa en el desplome del Impuesto Especial sobre Producción y Servicios (IEPS) a gasolinas y diésel, reportó la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP).
El Informe de Finanzas Públicas y Deuda Pública para el mes de agosto indicó que en el mes de referencia se tuvieron ingresos tributarios por 232 mil 956.6 millones de pesos, que es un aumento de 8.7 por ciento real respecto de agosto de 2016.
De tal forma que entre enero y agosto de este año se han recaudado un billón 959 mil 346.6 millones de pesos, que corresponde a un incremento de 1.4 por ciento real comparado con igual periodo de 2016.
En agosto mejoró la recaudación tributaria porque, de todos los impuestos, el IVA repuntó 22.3 por ciento real anual y porque el IEPS a gasolinas y diésel, si bien continuó con números negativos, la caída en la recaudación tomó una pausa y reportó una baja de 10.3 por ciento real, que es baja si se considera que en abril de este mismo año se desplomó hasta 47 por ciento la recaudación de ese impuesto.
Los ingresos presupuestarios del sector público durante enero y agosto de 2017 se ubicaron en 3 billones 440 mil 468 millones de pesos, monto superior 2.5 por ciento real en el mismo periodo del año pasado, lo que equivale a 532 mil millones de pesos adicionales a lo programado.
En tanto, en enero y agosto de 2017 el gasto neto pagado se ubicó en 3 billones 355 mil 202 millones de pesos, monto menor en 6.2 por ciento respecto de igual lapso del año pasado.
El gasto programable durante enero y agosto de 2017 fue de 2 billones 457 mil 240 millones de pesos, una baja de 10.7 por ciento real respecto de igual periodo del año anterior.
El gasto programable, sin incluir las aportaciones relacionadas con el Remanente de Operación de Banco de México (ROBM), disminuyó 46.4 mil millones de pesos respecto al programa, de los cuales 31.7 mil millones de pesos corresponden a la Administración Pública Centralizada, 31.9 mil millones de pesos a Pemex y 14.4 mil millones de pesos al IMSS y al ISSSTE, que se compensa en parte con mayor gasto de operación de la CFE por 32.6 mil millones de pesos.
Por su parte, el gasto no programable aumentó 13.1 mil millones de pesos respecto al programa, lo que se explica principalmente por un mayor pago de participaciones en 32.8 mil millones de pesos, debido a la evolución favorable de la recaudación federal participable.
A agosto los Requerimientos Financieros del Sector Público (RFSP) registraron un superávit de 125.5 mil millones de pesos, lo que representa una mejora de 280.9 mil millones de pesos respecto al déficit observado al mismo periodo de 2016.
"Este resultado está en línea con obtener un déficit de 1.4 por ciento del PIB al considerar el ROBM y cumplir la meta de 2.9 por ciento del PIB aun si se excluye el ROBM al cierre de 2017", indicó Hacienda en su informe.
Al cierre de agosto de 2017, la evolución de la deuda pública es consistente con reducir el Saldo Histórico de los Requerimientos Financieros del Sector Público (SHRFSP) de 50.1 por ciento del PIB al cierre de 2016 a 48.0 por ciento del PIB al cierre de 2017, considerando el efecto del ROBM de aproximadamente 1.5 por ciento del PIB. Sin considerar el ROBM, el estimado del SHRFSP se reduciría a 49.5 por ciento del PIB.
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