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El Gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador ha planteado una política social integral con programas prioritarios y con un sistema de operación basado en servidores de la nación; sin embargo, ha faltado integración de los programas y sus padrones, así como capacitación de los servidores de la nación como funcionarios que tienen un papel importante en la difusión.
Así lo concluyó el Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (Coneval) durante la presentación virtual del Informe de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (IEPDS) 2020, el cual contiene información que proporciona evidencia sobre los programas prioritarios del Gobierno federal a dos años de que inició la administración.
El Informe señala que es necesario contar con un sistema de información que integre los padrones de beneficiarios de los programas en un Padrón único de Beneficiarios que permita identificar los programas que operan en las mismas regiones y la población beneficiaria.
Además, se requiere de un documento rector que defina concretamente el modelo de coordinación del actual Gobierno federal y las actividades, las responsabilidades y el intercambio de información de los programas integrales de bienestar.
El Consejo indicó que la política social bajo este gobierno busca realizar un proceso eficiente al reducir el número de intermediarios, en el que participan los servidores de la nación y los Centros Integradores de Desarrollo, a fin de simplificar la gestión del quehacer gubernamental y lograr una mayor proximidad con los servicios que ofrecen.
Sin embargo, "no se encontró evidencia concreta del involucramiento de la Coordinación General de Programas para el Desarrollo en procesos medulares del funcionamiento de estos programas, tales como la planeación".
En ese sentido, Coneval recomendó continuar con la capacitación de los servidores de la nación, en específico sobre el funcionamiento de cada intervención, así como la sistematización y el envío de la información que conforma el Padrón Único de Beneficiarios.
"Se debe garantizar que los servidores de la nación conozcan a detalle los programas integrales de bienestar, lo cual no ha ocurrido en todos los casos. Por ejemplo, en los programas Producción para el Bienestar y Pensión para el Bienestar de las Personas con Discapacidad Permanente se observó una falta de conocimientos técnicos en aspectos clave para su operación".
José Nabor Cruz, secretario ejecutivo de Coneval, afirmó que "ante este contexto de crisis económica y sanitaria por la pandemia, la política de desarrollo social tiene grandes retos y oportunidades de acción, uno de los retos es evitar que se reviertan los avances obtenidos en la reducción de las carencias sociales hasta 2018".
Coneval estima que, ante los impactos derivados de la reducción de las actividades económicas, se podría generar un aumento de entre 8.9 y 9.8 millones de personas con ingreso inferior a la Línea de Pobreza por Ingresos, y de entre 6.1 y 10.7 millones de personas con ingreso inferior a la Línea de Pobreza Extrema por Ingresos.
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