Economía

Inflación apunta a la baja pese a su repunte en julio: Meade

El secretario de Hacienda y Crédito Público dijo que este aumento reportado en el mes de julio no debe ser factor de preocupación y que tampoco cambia la tendencia decreciente de la inflación pronosticada por el Banco de México.

A pesar del repunte inflacionario en julio a un nivel de 6.44 por ciento anual, José Antonio Meade, secretario de Hacienda y Crédito Público, aseguró que la inflación continuará su trayectoria decreciente hacia finales de año, tal y como lo prevé el Banco de México (Banxico).

Meade indicó que el dato de inflación de julio tiene cierto "ruido" por el aumento del precio del jitomate, pero, al ver en perspectiva los precios en su conjunto, lo que se observa es que el dato de inflación apunta hacia una tendencia a la baja.

"Si nosotros quitáramos el dato de inflación de hoy, es decir, la evaluación poco normal y extraordinaria de precio del jitomate, y si además consideramos el precio del jitomate y de la papa, o en ausencia de ese impacto extraordinario la inflación hubiera sido casi 30 puntos inferiores y se hubiera ubicado en 6 o 6.08 por ciento", afirmó.

De tal forma que "estamos ciertos de que habrá de consolidarse a finales de este año y principios del otro en el rango marcado por el Banco de México", dijo en entrevista.

Meade sostuvo que el dato de inflación no implica para la Secretaría de Hacienda y Crédito Público un tema de preocupación ni cambia su pronóstico de que la inflación seguirá convergiendo a la baja, por lo que se ubicará en los niveles que Banxico ha apuntado.

"Este dato hubiera sido inferior al que observamos el mes anterior; en términos generales, seguimos pensando que la trayectoria de inflación va a ser decreciente, que la trayectoria de precios va a converger y va a converger en los tiempos que el Banxico ha señalado", apuntó.

Sobre si el gobierno está protegido con las coberturas petroleras ante un impacto del peso por la tensión política entre Estados Unidos y Corea del Norte, dijo que la dependencia está pendiente de los mercados y que los riesgos no son solo para la moneda mexicana, sino para el resto de las divisas.

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