CIUDAD DE MÉXICO.- La desaceleración económica ya "tocó fondo" por lo que se espera que retome su curso ascendente, aseguró la Confederación de Cámaras Industriales (Concamin), la cual exhortó a concentrar el debate en las herramientas para impulsar el crecimiento incluyente y generador de oportunidades, como las reformas y la reindustrialización nacional.
En el documento Radiografía de la Economía Mexicana, la Confederación de Cámaras Industriales, la confederación sostuvo que en esta tarea hay dos objetivos cruciales y uno es el de completar las reformas estructurales y el otro aplicar una auténtica política industrial.
Precisó que para la reactivación esperada es necesaria la reanimación de la economía estadounidense, la generación de empleos en el sector formal de la economía mexicana, el repunte de las ventas en el mercado nacional.
Asimismo, el incremento en las remesas procedentes del exterior y el efecto favorable de la inversión pública sobre los proveedores directos e indirectos del sector público federal y los gobiernos estatales.
"Estamos en el camino adecuado y debemos recordar que tan importante como el ritmo de crecimiento de la economía, la inversión productiva y el empleo, lo es la calidad del avance que muestre cada uno de los indicadores", señala.
Para los industriales, la recuperación concentrada en pocos actores no generaría el impulso necesario para lograr un avance consistente y perdurable en la actividad económica, en la inversión productiva ni en la generación de fuentes de trabajo permanentes y cada vez mejor remuneradas.
Por lo tanto, asegura, el debate debe concentrarse en torno a los atributos y herramientas para impulsar un crecimiento incluyente y generador de más y mejores oportunidades para todos.
Refiere que el esfuerzo modernizador con las reformas estructurales y una política industrial dará a México condiciones para elevar la inversión productiva y la competitividad en sectores cruciales para el desarrollo.
En esta tarea, corresponde a los legisladores definir el mejor contenido de las leyes reglamentarias y promover el arribo de capitales, tecnologías, mayor competencia y mejores bienes y servicios en beneficio de empresas y familias.
En tanto, añade, una estrategia de reindustrialización permitirá posicionar al sector fabril como activo impulsor de la competitividad y como uno de los pilares del crecimiento estable y acelerado de la inversión y el empleo.