Algunos supuestos macroeconómicos dentro del Paquete Económico del 2020, presentado por la Secretaría de Hacienda, fueron calificados como 'muy optimistas' por economistas de instituciones financieras, los cuales podrían no cumplirse y ser un riesgo para las finanzas públicas del país.
El Presupuesto proyecta un avance del PIB de 1.5 a 2.5 por ciento para 2020, por encima del pronóstico del 1.3 por ciento de la última encuesta de Citibanamex. También prevé un alza en la producción de crudo a 1.95 millones de barriles diarios, contra el actual de 1.7 millones de barriles diarios, aunque la extracción de petróleo ha estado en constante declive desde el 2004.
"Es probable que el déficit presupuestario general del gobierno no alcance la proyección para el próximo año y que el superávit primario sea menor que el 0.7 por ciento del PIB proyectado", dijo William Jackson, economista de Capital Economics.
Destacó que preocupa la falta de gasto en inversión y que hay pocas promesas de apoyo para Pemex, pues los 86 mil millones de pesos para ayudar a la empresa representan solo 0.3 por ciento del PIB, lo que significa que el gobierno aún no está listo para comprometer un apoyo más sustancial a la empresa.
Marco Oviedo, economista en jefe para Latinoamérica de Barclays, señaló que el Presupuesto confirma que la ortodoxia fiscal es una prioridad para este gobierno, sin embargo, el enfoque actual tiene sus limitaciones dado el entorno de bajo crecimiento.
Dijo que el supuesto de producción de petróleo es "bastante optimista", por lo que si no se cumple con este objetivo la pérdida será de unos cinco mil millones de dólares.
"Dado que no hay cambios importantes en el nivel de apoyo a Pemex por parte del gobierno, los riesgos de la acción de calificación sobre Pemex siguen siendo altos", advirtió.
Moody's advirtió también que el optimismo de los supuestos macroeconómicos podrían provocar una sobreestimación de los ingresos presupuestarios del gobierno.