En los últimos seis años los llamados "banco tienda" que operan en el segmento popular han registrado el mayor crecimiento medido por el valor de sus activos.
De acuerdo con datos de la Comisión Nacional Bancaria y de Valores (CNBV), entre 2007 y 2013, mientras los activos totales del sistema bancario crecieron 121 por ciento, los bancos asociados a tiendas comerciales crecieron más de mil por ciento.
BanCoppel, que inició operaciones en 2007, ha tenido el mayor aumento en sus activos, al registrar en ese periodo un crecimiento de 3 mil 306 por ciento.
En segundo lugar se ubicó Banco Ahorro Famsa que mostró un crecimiento de 2 mil 446 por ciento y Banco Wal Mart que creció mil 839 por ciento. En Banco Azteca este indicador avanzó 92 por ciento.
La cartera de crédito de estas instituciones aumentó 295 por ciento, en conjunto, contra un 79 por ciento del total de la banca.
Sin embargo, también bancos que iniciaron operaciones en la última década han mostrado crecimientos exponenciales. Destaca el caso del Deutsche Bank, que en el periodo de referencia registró un aumento en sus activos de 4 mil 928 por ciento.
En contraste los mayores bancos del sistema como Banamex, BBVA Bancomer y Santander registraron crecimientos de 100, 94 y 102 por ciento, respectivamente.
Para David Olivares, vicepresidente de calificación de Bancos de Moodys, el crecimiento de los llamados "banco tienda" que operan en el segmento popular no ha sido nada sencillo, porque surgieron cuando empezó la crisis financiera internacional.
"Cuando recién fueron autorizados para operar tuvieron que iniciar en un ambiente volátil, en plena crisis debían probar que su modelo de negocio era viable, ha sido un crecimiento grande porque provienen de una base cero".
Consideró que la curva de aprendizaje se ha retrasado porque surgen en la crisis, y a siete años de distancia, apenas mostrarán que su modelo es viable y eficiente.
"Deben trabajar en desarrollar sus fuentes de fondeo, porque la mayoría de estos bancos han estado financiando su crecimiento básicamente con capital propio, entonces es importante que accedan a más recursos vía la captación en sus sucursales y busquen fondeo bancario".
El reto para estos bancos, dijo, es mostrar que crecen sanamente y administran sus riesgos adecuadamente, ya que registran altos niveles de morosidad.
En opinión de Mónica Ibarra y Alejandro Tapia, analistas de instituciones financieras de la agencia calificadora Fitch Ratings, el crecimiento exponencial de estos bancos en el segmento popular, es porque la mayoría aprovechan la sinergia que tienen con sus compañías controladoras, como es el caso de Banco Ahorro Famsa o Elektra con Banco Azteca.
OPORTUNIDAD DE NEGOCIOS
Aunque al operar en el segmento popular están en un segmento de clientes más riesgoso, ya que deben trabajar con un grupo de la población de ingresos más bajos, lo que los expone más en su operación.
Los crecimientos elevados que han registrado estos bancos, coincidieron, son también una oportunidad de negocios, no sólo para estas instituciones, sino para el país, porque la penetración de la banca sigue siendo baja como proporción de la economía, por lo que en este sector hay espacio para crecer.
Eduardo Gómez, líder de la práctica regulatoria y de cumplimiento del Sector Financiero en PwC México, indicó que los niveles de crecimiento que han registrado estos bancos continuarán en los próximos años, desarrollo que hasta ahora ha sido sano, pues sus niveles de capitalización se mantienen por encima de los mínimos solicitados por la CNBV.
Los especialistas prevén que en los próximos años seguirán observándose altos niveles de crecimiento en estos bancos, sin que ello signifique un "foco rojo" para el sistema financiero.
EL CASO DEUTSCHE BANK
El crecimiento de la filial del banco alemán le ha permitido ubicarse como el sexto banco más grande en el país, por el monto de sus activos.
Ha logrado mantener una fuerte posición de mercado en el sector fiduciario, el cual representa alrededor de 20 por ciento de sus ingresos, pero también la entrada de recursos por actividades de intermediación en derivados y mercado de dinero han representado más de 50 por ciento de sus ingresos, lo que lo mantiene con una perspectiva estable, según reporta la agencia calificadora Standard & Poor's.
En este año, la agencia prevé que tenga niveles de utilidades más en línea con el promedio de los últimos cinco años fiscales, esto apoyado por menores gastos de administración y promoción tras el fuerte incremento observado en 2012, por contratación de personal e inversión en infraestructura. Por ello, estimó que el banco mantendrá su estatus de subsidiaria "altamente estratégica".
