La Comisión Nacional de Hidrocarburos (CNH) dio su recomendación técnica favorable para que cuatro nuevos campos sean migrados a contratos de exploración y producción y así Pemex pueda asociarse. Se trata de los campos Ek y Balam que se convertirán en uno solo y Sinan y Bolintiku que correrán con la misma suerte.
Con esta aprobación la Secretaría de Energía (Sener) ahora procederá a definir el tipo de contrato (producción compartida o licencia) y la Secretaría de Hacienda y Crédito Público a definir los términos fiscales con los que se explotarán estos campos.
Para presentar su solicitud de migración, Pemex argumentó que al migrar estos contratos de su actual forma, es decir contratos de servicios, a contratos de exploración y producción se podrá optimizar la inversión, recuperar las reservas que tiene clasificadas, se generará mayor actividad y por tanto mayor inversión y se adquirirá mayor experiencia técnica por las aportaciones del socio.
Estas son las primeras solicitudes de migración de contratos que la CNH recibe. Su importancia radica en que Pemex buscará socios por primera vez bajo la nuevas reglas de la reforma energética.
Estos campos se encuentran en aguas someras a 95 kilómetros al noroeste de Ciudad del Carmen y tienen un tirante de agua de 55 metros de profundidad.
Sinan y Bolontiku forman parte del activo Crudo Ligero Marino que junto con otros campos produjo al 13 de septiembre 90 mil barriles diarios de petróleo. A todo este activo se le asignaron 8 mil 438 millones de pesos en el Proyecto de Presupuesto de Egresos de la Federación 2016.
Por su parte el proyecto integral Ek-Balam recibiría recursos propios de Pemex en 2016 por 5 mil 871 millones de pesos.