Economía

COVID-19 desploma ganancias de JPMorgan a su nivel más bajo desde 2013

La institución informó este martes que ese índice presentó una caída de 69% en los primeros tres meses de 2020

JPMorgan informó este martes que sus ganancias del primer trimestre del año cayeron 69 por ciento al nivel más bajo en más de seis años a medida que aumentaron los costos de crédito, dando a los inversores una primera visión de la magnitud del daño que el nuevo coronavirus está causando en las instituciones bancarias.

El banco reservó 8 mil 290 millones de dólares para préstamos incobrables, la mayor provisión en al menos una década y más del doble de lo que algunos analistas esperaban, mientras lidiaba con los efectos de la pandemia del COVID-19 en la economía. Eso provocó la primera caída de ganancias del banco desde el cuarto trimestre de 2017.

El CEO de la firma, Jamie Dimon, advirtió a principios de este mes que el banco no sería inmune a las consecuencias de la pandemia, prediciendo en su carta anual a los accionistas que la economía sufrirá una "mala recesión" y un estrés financiero semejantes a los de la crisis financiera de 2008.

"Dada la probabilidad de una recesión bastante severa, era necesario construir reservas de crédito", enfatizó Dimon en un comunicado este martes.

"El primer trimestre presentó algunos desafíos sin precedentes y nos obligó a centrarnos en lo que nosotros como banco podríamos hacer, fuera de nuestro curso normal de negocios, para mantenernos fuertes, resistentes y bien posicionados para apoyar a todos nuestros grupos de interés", agregó.

Parte del daño fue compensado por las ganancias en la operación comercial del banco, que se benefició de una volatilidad récord durante el trimestre a medida que los inversores entraban y salían de sus posiciones en respuesta a la crisis en curso.

JPMorgan generó alrededor de 7 mil 230 millones de dólares por acciones comerciales y bonos, la mayor cantidad registrada, según datos compilados por Bloomberg.

Las ganancias comerciales se produjeron en tres meses 'salvajes' para los mercados, con acciones que alcanzaron niveles récord en enero solo para sufrir la mayor disminución desde el colapso de 1987, una vez que el alcance de la pandemia comenzó a aclararse.

Este día, el banco redujo su perspectiva para todo el año para los ingresos netos por intereses (ingresos de los pagos de préstamos de los clientes menos lo que el banco paga a los depositantes) en mil 500 millones de dólares a 55 mil millones de dólares.

Esta fuente de ingreso representó aproximadamente la mitad del total para la compañía en 2019, y en el pasado ha ayudado a contrarrestar resultados más volátiles en las divisiones de comercio y banca de inversión.

La Reserva Federal tuvo dos recortes de tasas de emergencia, lo que llevó el índice de referencia del banco central a prácticamente cero. La acción de emergencia se produjo cuando surgieron más pruebas de que el virus y el cierre económico mundial estaban golpeando fuertemente a la economía estadounidense.

Por su parte, JPMorgan ha estado eximiendo tarifas de algunos préstamos, permitiendo a los clientes diferir los pagos de hipotecas y préstamos para automóviles, y eliminando los requisitos mínimos de pago de las tarjetas de crédito. Está planeando prestar casi 150 mil millones de dólares a clientes en todo el mundo.

Analistas de KBW liderados por Brian Kleinhanzl explicaron en un informe del 8 de abril que esperan que las provisiones alcancen su punto máximo en el segundo trimestre a medida que los bancos construyan reservas antes de los desembolsos esperados según las reglas contables de las Pérdidas Crediticias Esperadas Actuales (CECL, por sus siglas en inglés) recientemente adoptadas.

Los inversores y analistas se sienten cómodos con el hecho de que los bancos están entrando en un período incierto con niveles de capital más altos que durante la crisis financiera de 2008.

"La compañía entró en esta crisis en una posición de fortaleza, y seguimos bien capitalizados y altamente líquidos, con un índice CET1 de 11.5 por ciento y recursos de liquidez totales de más de un billón de dólares", remarcó Dimon en un comunicado.

Si bien los resultados ofrecen una mirada al impacto del virus, la imagen está algo confusa porque incluyen enero y febrero antes de que las medidas de cuarentena del Gobierno empezaran a ser aplicadas.

Los analistas esperan que los trimestres futuros muestren aún más daños a las empresas de consumo, ya que las tasas de interés cercanas a cero y el aumento del desempleo cobrarán un precio.

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