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La inversión productiva en México se ubicará en 20.9 por ciento del PIB en 2019, su menor cifra en casi desde 2005, y además en todo el sexenio se mantendrá en niveles ligeramente inferiores, lo que tendrá repercusiones en el crecimiento económico y con ello se avizora un panorama fiscal más desafiante, advirtió Citibanamex.
En un reporte, analistas del grupo financiero señalaron que la naturaleza discrecional en la toma de decisiones en la administración de AMLO, con anuncios que van desde la cancelación del NAIM hasta la construcción de una nueva refinería por parte de la Secretaría de Energía y Pemex, se está reflejando en una preocupante carencia de inversión.
"Los 'espíritus animales' ya estaban cautelosos antes de la toma de posesión de AMLO, pero los eventos desde entonces los han debilitado aún más", afirmaron.
Según los pronósticos de la institución, la inversión del sector público aumentará en el periodo, pero apenas compensará la caída en el gasto productivo del sector privado.
Los pronósticos contrastan significativamente con las metas del gobierno, de alcanzar un crecimiento de 6 por ciento al cierre de sexenio y de 4 por ciento en promedio para el periodo.
Para la inversión la meta oficial es alcanzar un 25 por ciento, pero el sector privado estima que este nivel es insuficiente y para lograr el crecimiento estimado se requiere un gasto en este rubro equivalente a 30 por ciento del PIB.
El FMI también estima que la inversión en el país registrará una tendencia a la baja en la presente administración y se ubicará en 20.6 por ciento en 2024.