El sistema bancario tiene responsabilidades muy importantes con los mexicanos, desde facilitar la accesibilidad a productos financieros hasta brindar información a los clientes para evitar que caigan en fraudes, aseguró Carlos López-Moctezuma, director general de Bancoppel.
Una responsabilidad como gremio está relacionada a los fraudes y ataques de los que pudieran ser víctimas los cuentahabientes. Este problema se puede resolver, dijo, a través de compartir información, así como con el desarrollo de herramientas tecnológicas para prevenirlos.
“Me preocupa que quieran engañar a nuestros clientes y quieran robar su dinero, porque detrás de todo eso la reputación del sistema bancario juega un rol. El trabajo que hagamos para proteger con tecnología y concientización a los clientes es muy importante, porque las bandas (criminales) siempre van innovando también”, manifestó en entrevista previa a la 87 Convención Bancaria.
Señaló que el sistema se enfrenta a una época donde la evolución está a la orden del día con la entrada de nuevos intermediarios. Ante este escenario, el banquero reconoció que para ganar la fidelidad de sus usuarios es necesario elevar todavía más la calidad del servicio físico y digital, este último, en un momento en el que apuestan por una transformación de esta índole.
Reconoció que el camino no es fácil ni rápido, porque se tienen que cambiar muchos rubros en la institución, entre sistemas y procesos. Han invertido tiempo en hacer una planeación de esta transformación para obtener los mejores resultados.
BanCoppel ha sido, en su mayoría, el primer contacto con el sistema financiero formal de sus usuarios. Bajo este contexto, López-Moctezuma afirmó que quieren que sus utilidades sigan al alza y con su visión hacia 2030 tienen claro hacia dónde quieren llegar a través de nuevos productos.
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ESTABILIDAD MACRO
Al hacer un balance sobre la administración que está por concluir, el directivo sostuvo que en este sexenio predominó la estabilidad macroeconómica, con finanzas públicas sanas, y si bien ha aumentado el endeudamiento, a lo cual instó a estar atentos, en general los indicadores se han mantenido bien.
Sobre las tasas de interés refirió que es muy difícil que el referencial suba de nuevo, porque el Banco de México tiene mucho espacio para hacer reducciones al haber iniciado el ciclo alcista antes que la Fed y, por lo tanto, tiene una brecha alta en comparación con Estados Unidos, y una inflación que va a la baja.
Opinó que un signo de alerta sería si la inflación se vuelve a descontrolar o el indicador subyacente no cede. Esto ocasionaría que las tasas no bajaran tan rápido y se pudiera generar algún problema en la cartera de crédito, pero este escenario es poco probable.
Hacia delante, el próximo gobierno tendrá una presión fiscal importante en cómo financiar sus proyectos. “Nadie está estimando que vaya a pasar algo malo porque vaya a haber elecciones o porque vaya a ganar un candidato u otro. Yo creo que las decisiones de consumo de las personas van a ser constantes”, con lo que descartó algún impacto entre el sector ante esta transición política.