BMV se ‘frota las manos’: espera emisiones de deuda corporativa por 50 mil mdp

Hay 14 emisiones de deuda corporativa de largo plazo programadas para las siguientes seis semanas por 50 mil millones de pesos. De concretarse, este tipo de colocaciones crecería 117 por ciento anual en el primer semestre de 2023, de acuerdo con datos de la Bolsa Mexicana de Valores (BMV).

Juan Manuel Olivo, director de emisoras en el centro accionario, detalló que en los primeros cuatro meses de 2023, el financiamiento de deuda corporativa fue superior a los 100 mil millones de pesos con lo que creció 3.5 veces respecto al mismo periodo de 2022.

“Esto confirma en gran medida esta tendencia de emisiones corporativas, bancarias y gubernamentales. Así esperamos que se siga manteniendo para las siguientes semanas”, manifestó.

José Oriol Bosch, director general de la BMV, agregó que el posible monto representa buenas noticias, pues tienen un pipeline “interesante y activo”.

De hecho, una de las emisiones de deuda de largo plazo programadas en abril fue la de Fideicomisos Instituidos en Relación con la Agricultura (FIRA) por 8 mil 500 millones de pesos, de los cuales 2 mil 985 millones de pesos fueron a través de dos bonos de resiliencia.

Jesús Alan Elizondo, director general de FIRA, explicó que los tres primeros bonos verdes que colocaron en los mercados estuvieron enfocados en mitigar la emisión de gases de efecto invernadero de los productores mexicanos, mientras que el actual está enfocado en ayudarlos a resistir los efectos del cambio climático.

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“Es una tendencia mundial que los grandes fondos de inversión demanden instrumentos que tengan un contenido ambiental y social. Esto lo piden los inversionistas, no es que de pronto las empresas quieran ser más amigables con el ambiente”, justificó Alberto Lara, director de finanzas de Fideicomisos Instituidos.

Habrá afectación por desaparición de Financiera Rural

Elizondo informó que desde abril del año pasado, tenían conocimiento de la salida de Financiera Nacional de Desarrollo Agropecuario, Rural, Forestal y Pesquero (FND). Por ello, trabajaron en conjunto para migrar a productores apoyados por la entidad a un esquema privado.

“Sería erróneo señalar que no va haber un impacto en el financiamiento particularmente en los muy pequeños productores. Por supuesto que Financiera Rural ha jugado un papel muy relevante en el sector del campo”, aseveró.

Ante esta situación, el director general de FIRA explicó que existen dos modelos para financiar el campo: uno es instalar sucursales en regiones especializadas y el otro es ocupar infraestructura de intermediarios que ya están. Los modelos se evalúan de acuerdo con la entidad en que se trabaje, indicó.