Economía

¿Jornada laboral de 6 horas? ‘Es una ocurrencia seductora pero ilusoria’: Especialistas

¿Se puede reducir la jornada laboral de 8 a 6 horas al día en México como propone un senador de Morena? Esto dicen especialistas de Coparmex, sindicalistas y expertos en materia laboral.

Representantes del sector privado, sindicalistas y expertos en materia laboral consideran inviable la propuesta del senador Ricardo Velázquez de reducir la jornada laboral de 8 a 6 horas diarias, ya que para que sea posible se debe apostar primero a elevar la productividad en el país.

Calificaron la iniciativa de ley como “una ocurrencia, muy seductora para la clase trabajadora, pero ilusoria, si se considera la situación actual de la economía y las empresas”.

“La propuesta compara a México con otros países desarrollados como Holanda, Francia, Suiza y Alemania, que tienen condiciones totalmente diferentes de economía formal y de seguridad social; consideramos que para el caso mexicano es totalmente inviable, para que sea posible bajar las horas de trabajo se debe elevar la productividad laboral”, afirmó Ricardo Barbosa, presidente de la Comisión Nacional Laboral de Coparmex.

“Las estadísticas señalan que México es de los países con más horas trabajadas y con menos productividad, lo que quiere decir que la productividad no necesariamente está ligada al horario de trabajo”, agregó.

Susana Prieto, representante legal del Sindicato Nacional Independiente de Trabajadores de Industrias y de Servicios Movimiento 20/32 (SNITIS), afirmó que “la propuesta es buena, pero ilusoria, debido a que plantea que se iguale la jornada laboral del sector industrial y productivo de todo el país con la jornada de los burócratas”.

“Digo que es ilusoria porque me parece imposible que en el sector industrial y sobre todo las empresas transnacionales vayan a aceptar una reducción de la semana laboral de 48 a 36 horas”.


La también diputada federal afirmó que presentará en septiembre en San Lázaro una iniciativa de Ley más equilibrada para reducir la semana laboral a 40 horas, con dos días de descanso semanal. Con ello, se cumpliría con lo firmado en el T-MEC, en el apartado 23 A, de tener iguales beneficios para los trabajadores, ya que en Canadá la semana laboral es de 35 horas y en Estados Unidos de 40.

Jorge Sales Boyoli, experto en derecho laboral, consideró que cuando un decreto se aprueba por ocurrencias de legisladores, tienen un impacto económico en las empresas.

“Me parece que estas iniciativas podrían tener más futuro cuando son producto del diálogo entre los patrones, el gobierno y los trabajadores y no cuando son fruto de alguna ocurrencia”, enfatizó.

Barbosa recalcó que pensar en bajar de 48 a 36 horas la jornada semanal de trabajo es inviable, ya que en lugar de mejorar la calidad de vida del trabajador la empeoraría, porque no puede haber un cambio tan grande en especial en esta coyuntura económica. Recuerden que en México el 70 por ciento de las empresas formales son Mipymes, que tienen entre 25 y 30 trabajadores, entonces estaríamos fomentando la informalidad, empleos sin seguridad social y sin salario completo.

Otros representantes del sector privado explicaron que México se ubica como el segundo país peor evaluado en materia de productividad entre los países de la OCDE. Mientras que en México se producen 20 dólares por hora trabajada, el promedio de los países de la OCDE es de 54 dólares por hora trabajada.

Por ello, la iniciativa que pretende reducir de 8 a 6 horas la jornada máxima laboral en México, no debe aprobarse, ya que afectaría de manera importante la productividad, y en consecuencia tendría impactos no deseables en la economía.

Sales Boyoli dijo que la propuesta puede comenzar el análisis para pensar si las organizaciones tendrían que ayudar a sus empleados a eliminar distracciones e ineficiencias para tener un rendimiento mayor y ser más productivos en menores horas, ya que trabajar muchas horas no es sinónimo de productividad y no se ve en la iniciativa este ingrediente de productividad.

Porque la carga para un patrón con una jornada reducida estriba en que después de 6 horas tendrá que pagar tiempo extra, pero si se le dice al patrón que van a trabajar 6 horas pero van a ser tan productivos que cuando laboraban 8 horas, al patrón le daría igual cuantas horas trabajen.

“Esta ocurrencia es muy seductora para la clase trabajadora, pero se debe pensar en una iniciativa más equilibrada que hable de la productividad y de otras cosas”, recalcó Jorge Sales.

La iniciativa de Ley del senador Velázquez Francia, Suiza y Alemania tienen una jornada laboral de 35 horas a la semana, Holanda de 29 y Dinamarca de 33.

Pero también reconoce que en Sudáfrica y Bélgica se trabajan 50 horas por semana, en Corea del Sur 52 y en China 72.

También lee: