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Rusia-Croacia, la geopolítica los debilitó

Ambas Selecciones jugaron en el Mundial de Chile 1962, pero como URSS-Yugoslavia. El mundo y el futbol han cambiado drásticamente desde entonces.

Lo que hoy es un Rusia-Croacia que será visto en millones de hogares en todo el planeta, en el Mundial de Chile 1962 fue un URSS-Yugoslavia -saldado con victoria soviética de 2-0- que sólo fue presenciado por 9 mil 622 espectadores que acudieron al estadio de Arica. Queda claro, por si faltaran más ejemplos, que el mundo y el futbol han cambiado drásticamente.

La geopolítica no le ha ayudado a las dos Selecciones que se enfrentan este sábado en Sochi. Han pasado casi 30 años desde la disolución de la URSS, y Rusia ha necesitado tener el Mundial en casa para llegar a unos cuartos de final, instancia a la que, cuando era una de las 15 repúblicas soviéticas unificadas, había disputado hasta en cuatro ocasiones.

Igual habrá que reconocer que si Rusia puede quejarse de haber sido debilitada, el resto de los nuevos países desmembrados lo pueden hacer con mucha más fuerza. De las otras 14, sólo Ucrania pudo clasificarse a un Mundial (2006), mientras que Letonia, Lituania, Moldavia, Bielorrusia, Georgia, Uzbekistán lo han intentado sin éxito y otras tantas ni siquiera eso.

De la separación de Yugoslavia, sin duda Croacia fue futbolísticamente la nación más favorecida o menos afectada, según quiera verse. Por algo ha asistido desde entonces a cinco Mundiales y cinco Eurocopas, números que le alejan claramente del resto de los países que brotaron de aquel desmembramiento: Bosnia, Serbia y Eslovenia.

Los serbios acudieron a los Mundiales de 2010 y 2018, los eslovenos hicieron acto de presencia en 2002 y 2010, y Bosnia estuvo en Brasil 2014; todos ellos se atoraron en la fase de grupos, de la que ha emergido con fuerza Croacia por segunda vez en su historia.

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