Ciencia

¿Pensabas usar un vapeador? Estudios hallan vínculo entre este hábito y problemas con la memoria

Las investigaciones se suman a la creciente evidencia de que vapear no debe considerarse una alternativa segura al tabaco, dijo Dongmei Li, profesor asociado de la Universidad de Rochester.

Las personas que vapean tienen más probabilidades de reportar dificultades para concentrarse, recordar o tomar decisiones, de acuerdo con dos estudios que también puntualizan que los adolescentes son más propicios a experimentar confusión mental si comienzan a vapear antes de los 14 años.

El uso de cigarrillos electrónicos (vapeador) se ha vuelto cada vez más popular entre los jóvenes. Si bien otras investigaciones han encontrado una asociación entre el vapeo y el deterioro mental en animales, estos dos nuevos estudios son los primeros en establecer esta conexión en las personas.

El equipo dirigido por Dongmei Li, profesor asociado en el Instituto de Ciencias Clínicas y Traslacionales del Centro Médico de la Universidad de Rochester, en Nueva York, extrajo datos de dos importantes encuestas nacionales.

"Nuestros estudios se suman a la creciente evidencia de que el vapeo no debe considerarse una alternativa segura al tabaquismo", explicó Dongmei Li. Aquellos que adoptan el hábito antes de los 14 años corren mayor riesgo, aseguró.

Los estudios, publicados en las revistas Tobacco Induced Diseases y Plos One, analizaron más de 18 mil respuestas de estudiantes de secundaria y preparatoria a la Encuesta Nacional de Tabaco en Jóvenes en Estados Unidos. Y más de 886 mil respuestas a la encuesta telefónica del Behavioral Risk Factor Surveillance System de adultos estadounidenses.

Ambas encuestas realizaron preguntas similares sobre los hábitos de fumar y vapear, así como sobre problemas con la memoria, la atención y la función mental.

Encontraron que las personas que vapean o fuman reportaron 'niebla' o confusión mental a tasas similares, que fueron significativamente más altas que las informadas por las personas que no fuman ni vapean.

Los estudiantes que informaron haber comenzado a vapear a temprana edad, entre los ocho y los 13 años de edad, tenían más probabilidades de presentar dificultades para concentrarse, recordar o tomar decisiones que aquellos que comenzaron a vapear a los 14 años o más.

"Con el reciente aumento del vapeo en adolescentes, esto es muy preocupante y sugiere que debemos intervenir incluso antes", dijo Li.

Si bien los estudios muestran claramente una asociación entre el vapeo y la función mental, no está claro qué causa cuál. Es posible que la exposición a la nicotina a través del vapeo cause dificultades en la función mental.

Li y su equipo dicen que se necesitan más estudios que sigan a niños y adultos a lo largo del tiempo para analizar la causa y el efecto del vapeo y la 'niebla' o confusión mental.

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