La primavera está aquí y la moda masculina lo sabe

Ya viene la primavera con elevadas temperaturas que amenazan con ser largas. Para la oficina o para descansar el fin de semana se antojan prendas que facilitan el movimiento y la comodidad, pero sin perder un estilo elegante. La clave está en las telas y la hechura como lo demuestra la nueva colección de Alessandro Sartori para Ermenegildo Zegna.

En la Couture primavera-verano 2019 resaltan opciones con inspiración deportiva. El lujo citadino se aprecia en siluetas livianas y desenfadas como sacos, parkas y camisas oversize que se combinan con joggers -con elástico o botón al tobillo- y pantalones anchos. También regresan las pinzas.

El estampado a cuadros y las rayas son constantes; pueden usarse combinadas entre sí o con prendas lisas. El diseñador emplea la tessuto fazzoletto, técnica italiana que yuxtapone diseños sobre telas como cashmere y seda texturizada, que nace a partir de hilos obtenidos de fuentes silvestres naturales.

"Para mí crear siempre viene de un desafío técnico. En esta colección presento formas audaces y voluminosas, pero muy ligeras, dispuestas en capas de mallas, lanas y sedas", explica Sartori sobre sus creaciones para el hombre contemporáneo interesado en la alta costura y que en la marca se identifica con el logo XXX.

Pero no todas las opciones son tan conceptuales. La línea Ermenegildo Zegna incluye prendas más clásicas como trajes, suéteres y pantalones de lanas ligeras, con especial énfasis en una prenda que le va bien a todas las edades, la bomber jacket, que continua con su supremacía. Se propone en una tela satinada de microsilk, pero se puede hacer a la medida; el cliente elige color, tela y tipo de puño.

Azul pálido y náutico, así como rosa, arena, moca y beige, son los colores ideales para que ellos se mantengan frescos y a la moda. Magenta, gris y verde también se incluyen dentro de la paleta de colores.

Hay tres constantes de estilo que se repiten de temporadas pasadas: la distancia entre el largo del pantalón y el zapato para que se asome el tobillo; los tenis que repiten como el calzado más cómodo y que se usan incluso con traje, y la desaparición de los calcetines.