Bloomberg Businessweek

Game changer: Antonio del Valle Ruiz

El banquero y empresario ha encontrado constantemente la manera de expandir su imperio y mantenerse vigente.

Hay personas que por más que cambie el mapa simplemente no dejan de aparecer en él. Desde hace cuatro décadas, Antonio del Valle Ruiz se ha mantenido como un protagonista indiscutible e importante del entorno empresarial y bancario en México.

Además, desde hace varios años ha sido una figura altruista importante en el país, con donaciones destinadas a la educación y la vivienda. Asimismo, ha favorecido a las artes con apoyos a museos, como el de Arte Moderno de Nueva York y el del Prado, en Madrid.

Del Valle, de 79 años, comenzó a trabajar desde chico en el negocio textil de su familia, El Asturiano, llamado así por la región española de la que provinieron sus antecesores hace varias generaciones.

En 1974, de la mano de varios socios, conformó el Banco de Crédito y Servicios, conocido posteriormente como Bancrecer. Con Del Valle al frente, el banco llegó a tener alrededor de cien sucursales en apenas 6 años y se consolidó como la primera institución de banca múltiple en México.

Solo una circunstancia extraordinaria podía detener el crecimiento del banco y así fue. En 1982, el entonces presidente de México, José López Portillo, nacionalizó la banca y obligó a Del Valle a ceder el control de Bancrecer al gobierno.

Muchos se llevaron la compensación de la nacionalización a casa y esperaron a que pasara el temporal. No Antonio del Valle, quien se lanzó a un nuevo proyecto empresarial, esta vez, en el sector químico a través de Grupo Industrial Camesa.

"Don Antonio", como suele llamarle la gente, elevó en 2003 su participación en ese grupo de 50 a 94 por ciento. Dos años más tarde, cambió de nombre a Mexichem. Actualmente la empresa química cuenta con más de 18 mil 300 empleados, tiene presencia en más de 30 países y una valuación de mercado de 106 mil 491 millones de pesos. Por si faltara algo, recientemente Mexichem adquirió Netafim, una empresa israelí, en una operación valuada en alrededor de mil 895 millones de dólares.

La exitosas incursiones empresariales de Antonio del Valle no lo alejaron por completo de su primera vocación: la banca. En los años noventa, ahora con el proceso de privatización en México, Del Valle volvió al sector financiero en 1992, de la mano de sus socios de siempre, con la adquisición de Grupo Internacional, que a partir de 1995 sería conocido como Bital.

El proceso de privatización, al igual que la nacionalización años atrás, generó disgustos en Del Valle, quien solía decir que muchos bancos se asignaron a empresarios sin experiencia financiera, incapaces de administrar su nuevo negocio. En 2002 salió de Bital y dos años después fundó Banco Bx+, cuyas oficinas asentó en una antigua casona en Paseo de la Reforma, la primera en construirse en la avenida más importante de México. Ese banco adquirió el mes pasado a Bankaool, uno de las principales instituciones financieras exclusivamente en línea en México.

La idea es consolidarse en el sector de las Fintech y convertir a Banco Bx+ en un líder de la banca online. ¿Alguien duda que pueda hacerlo?

También lee: