SAN MIGUEL DE ALLENDE, Gto.— Thyssenkrupp iniciará con la construcción de su séptima planta de componentes automotrices en México, la cual tendrá una inversión aproximada de 45 millones de euros.
Las nuevas instalaciones se ubicarán en San Miguel de Allende, y se prevé que esté concluida en 2017. Con esta inversión, la empresa creará 230 puestos de trabajo.
La planta producirá tapas de culata con árbol de levas integrado para fabricantes de automóviles de la región de Norteamérica
"Nos beneficiamos de nuevos pedidos derivados del rápido crecimiento del mercado automotriz de Norteamérica, especialmente del mercado mexicano. Destinaremos una inversión de aproximadamente 500 millones de euros en nuevas plantas en los próximos cinco años para la región, de los cuales alrededor de la mitad serán aplicados a proyectos en México", señaló Karsten Kroos, CEO del Área de Negocios de Componentes de Tecnología.
La empresa destacó el crecimiento que ha registrado la industria automotriz mexicana en los últimos años, con más de tres millones de automóviles salidos de las líneas de producción del país en el último año, con un crecimiento interanual de casi el 6 por ciento.
También subrayó que los mayores fabricantes de equipo original (OEMs) del mundo tienen centros de producción en México, y continúan invirtiendo en nuevas plantas. El sector automotriz emplea alrededor de 600 mil personas, con lo que México se ha convertido en el sexto productor mundial de automóviles.
"La llegada de compañías de clase mundial como Thyssenkrupp a San Miguel de Allende es una clara señal de confianza en Guanajuato, en nuestra moderna infraestructura, en nuestro talento altamente calificado y en el ambiente de negocios competitivo", comentó Guillermo Romero Pacheco, secretario de Desarrollo Económico Sustentable.
Thyssenkrupp produce componentes para la industria automotriz en cuatro sitios de México, que incluyen componentes de motores y dirección, muelles y estabilizadores así como ensamblaje de módulos de ejes.
El año fiscal pasado, la división de componentes incrementó sus ventas en Norteamérica en un 17 por ciento, para alcanzar los 19 mil millones de euros. "Esta inversión ilustra la importancia de la región, la cual representa el 23 por ciento del total de las ventas de la empresa", indicó Patrick Bass, CEO de Thyssenkrupp North America.