'Pega' a Bajío escasez de personal capacitado

Las empresas del Bajío contratan a personal proveniente de toda la República, ante la falta de recurso humano capacitado en los estados de la región, declaró Julieta Manzano, directora comercial de Mercer.

Explicó que el Bajío, así como Jalisco y Nuevo León, es una región que ha crecido económicamente, por lo que desde hace varios años ha provocado una fuerte necesidad de colaboradores para las compañías, donde los sectores aeroespacial, automotriz e inmobiliario son los más pujantes.

"En la medida de que las empresas publican sus vacantes, se alistan personas de otras entidades y más desde que los jóvenes tienen mucha movilidad. Además de que el cambio de la rotación ya no es tan mal visto", afirmó Julieta Manzano.

Por separado, Susana Andrade, gerente territorio Bajío de Mercer, expuso que las empresas buscan la manera de generar nuevas estrategias en atracción de capital humano de otras entidades, donde una de ellas es abrir dormitorios para los colaboradores y salarios superiores a los de su lugar de origen o a la media nacional.

Puntualizó que las compañías atraen, principalmente, personal directivo, técnico, mandos intermedios e ingenieros.

También dijo que además de la insuficiencia del capital humano respecto a la demanda existente en el Bajío, el reto que tienen las empresas es la retención de personal.

Ante esta situación, la gerente de Mercer recomendó a los empresarios analizar sus inversiones, a fin de que los colaboradores adquieran lealtad y compromiso con la organización.

Asimismo, Susana Andrade sostuvo que deben implementarse estrategias de retención a corto y largo plazo, en el que se identifiquen las necesidades de los colaboradores y considerar la implementación de acciones como el salario emocional.

La compañía Mercer ha identificado que el personal no sindicalizado de las empresas del Bajío valora más el seguro de gastos médicos o tener una caja de ahorro, que su salario.

De acuerdo con su Encuesta de Remuneración Total hecha a las empresas del Bajío, el 65 por ciento de los entrevistados considera más importante lo monetario y el resto a lo intangible, es decir, valoran otros incentivos que no son económicos.